El mercado de trabajo no margina a los títulos extranjeros
Presentarse a una oposición, seguir una carrera docente o investigadora en la universidad, dedicarse a alguna de las profesiones que exigen estar colegiado (abogado, médico, ingeniero, arquitecto), firmar un contrato en prácticas o incluir en el currículo con todo derecho que se es licenciado, doctor, diplomado, ingeniero o arquitecto son privilegios exclusivos de quien posee un título oficial con validez en España.Obtener una titulación en una universidad extranjera y luego pedir su homologación no es el mejor camino para gozar de estas ventajas. Sin embargo, el origen de los títulos -homologables o no- parece ser menos determinante cuando el objetivo es incorporarse al mercado de trabajo.
El director de la división de Recursos Humanos de Price Waterhouse Coopers, Jesús Correas, cree que el mercado de trabajo está saturado de titulados universitarios y que ante tanta "titulitis" se busca gente con buena formación y que sepa transmitirla. "Ahora el título es más un valor de referencia que de diferencia; es decir, su carencia limita posibilidades", dice Correas.
Con esta premisa considera que un título extranjero puede llamar la atención de un seleccionador de personal por lo que lleva implicito (idiomas, experiencia, cultura), pero con la condición de que se tengan referencias de la calidad de la universidad extranjera: "Si no se desconfía, porque han surgido demasiadas escuelas de formación, sobre todo en el extranjero, donde el estudiante se lo pasa muy bien y de paso cubre el expediente de obtener un título con facilidad porque tiene medios para pagárselo, pero no aprende nada", sentencia Correas.
Sin barreras
El director de selección de personal de Arthur Andersen, Carlos López, asegura que "el potencial de cada persona está por encima de su título, no se mira sólo el origen de la universidad donde se ha formado. Si un candidato interesa como profesional, no hay barreras". En opinión de López, lo importante es contar con una trayectoria académica brillante, y si es así "da igual que el título sea de una universidad u otra. El mercado global impone abrirse". Arthur Andersen ha montado una "operación retorno" para captar estudiantes que han emigrado. "Nos interesa recuperar capital humano que hay fuera", dice López.
El director de Recursos Humanos de la Empresa de Trabajo Temporal Adecco, Carlos Viladrich, asegura que "a no ser que el cliente especifique que quiere un trabajador con una titulación determinada, contabilizamos como universitarios a los candidatos que se incoporan aunque su título no esté homologado, porque es un valor de formación". Viladrich cree que haber vivido fuera a veces compensa la circunstancia de que se tenga un título no homologable.
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