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Koch, el jefe de la CDU en Hesse, se aferra al cargo

Pilar Bonet

La dimisión de Wolfgang Schäuble ha intensificado la presión sobre Roland Koch, de 41 años, para que siga el ejemplo del presidente de la CDU y abandone su puesto al frente del Gobierno de Hesse y de la organización del partido en ese land alemán. Sin embargo, el benjamín de la CDU, que hace un año encarnó las esperanzas de renovación del partido, no se resigna a tirar la toalla y sigue aferrado a su cargo.Las presiones sobre Koch vienen de su propio partido. "Los criterios que se han aplicado a Wolfgang Schäuble deben aplicarse también a Roland Koch", manifestó la expresidenta del Bundestag, Rita Süssmuth. A favor del cese de Koch está también el jefe del grupo parlamentario de la CDU en Renania del Norte-Westfalia, Laurenz Meyer.

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A semejanza del Bundestag, el parlamento regional de Hesse formó ayer una comisión investigadora que debe aclarar el asunto de las cuentas clandestinas a escala regional. La comisión, sin embargo, estará presidida por un diputado de la CDU, lo que motivó las protestas del SPD, que es el principal partido de oposición desde que perdió las elecciones regionales el pasado febrero. El SPD local acusa a Koch de estar detrás de uno de los viajes a Suiza de Horst Weyrauch, el exasesor financiero de la CDU que abrió las cuentas clandestinas en aquel país. Koch y el abogado de Weyrauch niegan este extremo, que comprometería al dirigente democristiano y lo convertiría en cómplice de las cuentas clandestinas.

"Aborrezco a Kohl"

La oposición acusa a Koch de haber prestado falso testimonio repetido ante el Parlamento. En el Bundestag, diputados socialdemócratas, verdes, liberales y de los excomunistas de la antigua República Democrática Alemana pidieron ayer el cese de Koch. En Francfort, el SPD ha amenazado con suspender la cooperación con la CDU si la alcaldesa, la democristiana Petra Roth, no ayuda en las investigaciones de las cuentas clandestinas.

El desmoronamiento del sistema Kohl está dejando al descubierto la amargura y el resentimiento que se había acumulado entre los dirigentes de la CDU. "Aborrezco a Kohl. Y puedo hablar por toda la familia", dijo ayer Thomas Schäuble, el hermano de Wolfgang Schäuble.

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Thomas, que es ministro del Interior en el land de Baden-Württemberg, manifestó que su hermano aparecía visiblemente "liberado" al anunciar que abandonaba sus responsabilidades en el partido. Sin Wolfgang Schäuble, Kohl no hubiera sido canciller durante 16 años, dijo. Ahora, Wolfgang se plantea si "fue una buena cosa".

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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