El PNV se queda solo en su rechazo a que la Cámara intente solucionar el conflicto de los alardes

El PNV se quedó ayer solo. Ni su socio en el Gobierno vasco, Eusko Alkartasuna, ni su aliado parlamentario, Euskal Herritarrok, secundaron su negativa a crear una ponencia en el seno de la Comisión de Mujer y Juventud del Parlamento para impulsar soluciones al conflicto de los alardes de Irún y de Hondarribia. Así, el desmarque de EA y EH posibilitó la creación de un subgrupo de trabajo, al votar ambos a favor de esta iniciativa junto a socialistas e IU. El Partido Popular se abstuvo y Unidad Alavesa no votó al no disponer de representación en esta Comisión.

Los colectivos partidarios de la incorporación de las mujeres en los dos alardes con los mismos derechos que los hombres habían enviado a la Cámara una carta pidiendo la creación de esta ponencia. El Parlamento se ha pronunciado a favor de la igualdad de hombres y mujeres en varias declaraciones institucionales (12 de junio de 1997, 29 de junio de 1999 y 29 de octubre de 1999). Sin embargo, no había dado más pasos, a pesar de que todos los partidos consideran que el conflicto es una clara muestra de "intolerancia" y que, si no se reconduce, las explosiones de violencia crecerán en las dos localidades guipuzcoanas cuando llegue la hora de la fiesta en el verano. La plataforma Hondarribiko Emakumeak (Mujeres de Hondarribia), partidaria del Alarde tradicional, es decir, sin la presencia de mujeres, también había escrito al Parlamento. En su carta -hecha pública ayer en la Comisión- apostaban por mantener el Alarde "tal y como el pueblo lo quiere, como lo hemos venido haciendo desde el año 1639, sin ningún tipo de injerencia externa". "¿Dónde está nuestro derecho constitucional de tradición y autonomía de la voluntad del pueblo? ¿Cómo podemos terminar con la intrusión de todo aquel que se cree con derecho a opinar y a participar por la fuerza en un acto tradicional organizado por un ente de autonomía privada?", se preguntaba el colectivo. Finalmente, pedía a los partidos que desestimasen la creación de una ponencia para analizar los problemas que suscita el Alarde.

La parlamentaria del PNV, Izaskun Bilbao, reconoció que el problema se ha "enquistado" y que precisa de una solución urgente, pero rechazó que se trate de un conflicto que trascienda del ámbito local de Irún y Hondarribia. Además, recalcó la idea de que la violencia que se registra en los alardes procede de "las dos partes enfrentadas: partidarios del Alarde con mujeres y los que apoyan la fiesta tradicional". "Los llamamientos que pueda realizar el Parlamento, lejos de ayudar a solucionar el tema, lo que pueden hacer es encrespar aún más los ánimos. Lo que hay que hacer es dialogar, dialogar y dialogar, pero con discreción y sin dar publicidad, que es lo que ha está haciendo mi partido [el PNV] desde el año pasado", remarcó para justificar la negativa de su partido a crear una ponencia para realizar un seguimiento del enfrentamiento.

Lugar de consenso

El portavoz de IU, Javier Madrazo, resaltó las posibilidades que ofrece el Parlamento para mediar en un problema donde la "tradición no puede situarse por encima de los derechos democráticos". "La Cámara puede ser un buen lugar de consenso. Todos los partidos tienen representación y se puede recibir a los colectivos enfrentados para dialogar con ellos. Las instituciones más importantes de Euskadi no pueden quedarse al margen de lo que está ocurriendo", reflexionó.

Para Karmele Antxustegi, de EA, "las mujeres tienen derecho a participar en los alardes". "La creación de una ponencia supone dar un paso más para alcanzar alguna solución". La parlamentaria del PSE Gemma Zabaleta advirtió sobre "la importante responsabilidad pública" que recae en el Gobierno y en el Parlamento. "No se trata de un problema local. Al Parlamento le corresponde intervenir y hacer propuestas porque se están vulnerando una serie de derechos. Los partidos están dando pasos por su cuenta, pero en direcciones diferentes". Según Zabaleta, la ponencia puede ayudar a plantear "unos acuerdos mínimos que marquen el camino a seguir", subrayó.

Jone Goirizelaia, de EH, abundó en la necesidad de ayudar a los colectivos de mujeres que quieren disfrutar de la fiesta de los alardes en igualdad de condiciones que los hombres. "Hay que colaborar con los que le piden ayuda", zanjó.

Por otra parte, PSE, Izquierda Unida, EA, EH y el Partido Popular votaron a favor de promover una campaña institucional de sensibilización sobre la igualdad en los alardes. El PNV también se opuso.