Klima y Klestil pidieron la campaña europea contra Haider

Las acciones de protesta de la comunidad internacional contra la entrada en el Gobierno de Austria del derechista Partido Liberal (FPÖ) de Jörg Haider se realizaron con la intervención y el beneplácito de las máximas autoridades del país: el canciller federal saliente, el socialdemócrata Viktor Klima (SPÖ), y el presidente federal, Thomas Klestil. Así lo informó con detalle ayer en su primera página el prestigioso diario conservador de Viena Die Presse. El secretario general del FPÖ, Peter Westenthaler, calificó de escándalo el hecho y exige una explicación. Klestil y Klima se apresuraron a desmentir cualquier participación en la campaña.Die Presse abre su primera página con una información que califica de "Sorprendente giro en torno a las acciones de la Unión Europea". Una crónica del corresponsal del periódico en Copenhague recoge informaciones de un periódico danés, que da detalles de la puesta en marcha de la protesta contra la entrada en el Gobierno del FPÖ de Haider. Según esa información, todo se puso en marcha durante la reciente conferencia sobre el holocausto en Estocolmo. En su discurso, Klima calificó de inadecuados para asumir responsabilidades de Gobierno los partidos que minimizan el holocausto.

Klima aprovechó la ocasión para hablar con los jefes de Gobierno de Suecia, Alemania, Dinamarca y Francia, a los que pidió ayuda para combatir a Haider. A esta iniciativa se unió, el pasado fin de semana, el presidente Klestil.

Confirmación danesa

El primer ministro de Dinamarca, el socialdemócrata Poul Nyrup Rasmussen, informó en una sesión secreta de la comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento danés sobre la iniciativa extraordinaria de la UE contra Austria. La prensa danesa asegura haber confirmado la información con tres diputados de tres partidos diferentes presentes en la reunión, en la que Rasmussen informó de la acción que se iba a poner en marcha.

El canciller Klima se apresuró a desmentir su participación en la campaña y calificó de "invento absurdo" la noticia. El FPÖ de Haider no tardó en exigir explicaciones. "Se afirma que las más altas instancias del Estado austriaco son responsables de la campaña internacional contra su propio país. Si estas informaciones solventes se confirman, nos encontramos ante un gran escándalo. La población de Austria tiene derecho a saber lo que hay de cierto en estas acusaciones, y Klestil y Klima tienen que ofrecer una explicación", advirtió un alto responsable del partido.