El Parador del Saler asfalta varios caminos del campo de golf sin el permiso del Parque Natural de L'Albufera

El Parador del Saler ha emprendido sin el permiso del Parque Natural de L'Albufera el asfaltado de un camino de varios kilómetros y centímetros de grosor en el campo de golf. Medio Ambiente estudia expedientar a la dirección del parador después de examinar los informes que están ultimando los técnicos del parque, que desconocían que se estuviera llevando a cabo esta obra. "No me consta que se haya solicitado permiso alguno para iniciar estas obras", afirmó el miércoles a este diario José Segarra, director del Parque Natural de L'Albufera. Antonio Gómez Pastrana, director del parador, dijo ayer que las obras contaban con el "visto bueno" del anterior director del parque, Pedro Villanueva. Técnicos de Medio Ambiente se trasladaron ayer al campo de golf del Saler para examinar "la magnitud de los hechos" y estudiar el impacto que pueden provocar estas obras en el entorno.

Gómez Pastrana calificó de "restauración" la discutida obra: "Lo único que hemos hecho es restaurar unos caminos que existen desde que se construyó el campo en 1968. Éstos tenían una capa de hormigón que con el tiempo ha quedado destruida. Son los caminos por los que pasan los vehículos que entran al campo. Con las condiciones que hay aquí, esta capa también acabará desapareciendo, porque se está echando tierra alrededor de los caminos para sembrar césped". Pastrana defendió su gestión: "Nadie está reforestando en el parque más que nosotros. Vamos a plantar 500 pinos autóctonos; aquí no se ven ni preservativos ni jeringas como ocurre en otras zonas del parque. Después de 22 años aquí nadie tiene que decirme cómo hacer las cosas".

El asfaltado del camino se está llevando a cabo ante el asombro de la mayoría de socios del club de golf, que pagan una cuota de unas 160.000 pesetas anuales. "Este hombre hace la cosas con nocturnidad y alevosía. Nunca informa de nada. Es un déspota que va a la suya", dijo ayer un socio consultado al respecto por este diario.

Acció Ecologista Agró solicitó ayer a la Consejería de Medio Ambiente la "paralización" y la "confirmación de la autorización" que presume "no ha sido otorgada" para estas obras. "La gerencia del campo del golf, actuando con la prepotencia con la que hasta ahora no se había atrevido, y aprovechando la política de barra libre de la Consejería de Medio Ambiente, está llevando a cabo la construcción de una obra que secunda la política de la Administración que prima como siempre los intereses turísticos por encima de los intereses medioambientales", afirman desde Acció Ecologista-Agró.