El excanciller se ausenta de las celebraciones públicas

Helmut Kohl ha decidido no dar motivo para el agravamiento de las tensiones con su partido y con otras fuerzas políticas alemanas y no estará presente como invitado de honor en las fiestas de conmemoración del centenario de la Asociación del Fútbol Alemán (DFB) que se celebrarán el viernes en Leipzig. Hasta el lunes por la mañana, los organizadores esperaban contar con la presencia del ex canciller, pero éste llamó por teléfono a Egidius Braun, el presidente de la DFB, y le comunicó su intención de no asistir al acto.Aunque la invitación, cursada hace seis meses, seguía en pie, la presencia de Kohl había provocado un acalorado debate en Leipzig. Varios políticos socialdemócratas habían pedido que Kohl fuera eliminado de la lista de oradores y el secretario general de los socialdemócratas, Franz Müntefering, había solicitado que se evitara a los otros invitados "la molestia" de tener que tratar con un huésped de honor que "ha actuado contra el derecho y la ley". Otros invitados del evento son el canciller federal Gerhard Schröder, el presidente de la FIFA, Sepp Blatter, y el presidente federal, Johannes Rau.

Mueve multitudes

La calurosa acogida que Kohl recibió la semana pasada en un acto de la CDU de Bremen mostró que el ex canciller aún mueve multitudes y goza de gran apoyo en la base del partido, pese a que sus allegados en la dirección del partido se hayan distanciado de él.

Como reacción al asunto de las cuentas clandestinas, el democristiano Gerhard Pohl, que fue el último ministro de Economía de la RDA, exhortó el lunes a fundar una agrupación independiente del partido en el este de Alemania. La iniciativa fue rechazada por diferentes personalidades de la CDU en el este de Alemania, pero muestra hasta qué punto el asunto de las cuentas ha impresionado al este del país. Pohl había exhortado a todas las organizaciones de la CDU en el Este a comenzar los preparativos de un congreso extraordinario para constituir una organización independiente y había argumentado que sólo de esta forma está asegurada la supervivencia de la CDU en el Este.

El ex ministro de Comunicaciones de la RFA, el democristiano Günter Krause, reaccionó positivamente y señaló que "en principio se trata de una buena idea, pero tenemos que esperar al congreso federal del partido en abril". Si el programa de la CDU en su conjunto no representa los intereses del Este, las organizaciones de este territorio podrían reflexionar sobre una CDU local formada según el modelo de la Unión Social Cristiana de Baviera, declaró Krause al diario Bild.