El Gobierno navarro aprueba liberalizar la apertura de nuevas farmacias

El Gobierno navarro dio ayer luz verde a un proyecto de ley foral que liberaliza la apertura de nuevas oficinas de farmacia en la comunidad y crea la figura de la farmacia concertada para dispensar los medicamentos recetados por el sistema sanitario público. El proyecto de ley, que nace después de que un intento anterior de la consejería de Salud, elaborado la pasada legislatura, fracasase por falta de apoyos, introduce destacadas novedades respecto a la situación actual del sector. Hace apenas dos meses, el PSN presentó su propia proposición de ley de liberalización del sector.

La futura ley foral de Atención Farmacéutica permitirá, cuando entre en vigor tras su paso por el Parlamento navarro, que los centros hospitalarios y residenciales de más de cien plazas cuenten con su propio servicio de farmacia. Además, diseña una nueva planificación de las oficinas en la que, además de los criterios de población y distancia, se tendrá en cuenta un nuevo factor: el nivel de envejecimiento de cada zona geográfica. Una vez atendida la red mínima de oficinas que prevé la nueva ley, se podrán abrir farmacias libremente.Eso sí, será el Gobierno foral el que determine qué oficinas podrán concertar su oferta con el Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea. Se pasará así de una concertación automática a un sistema selectivo a la hora de dispensar medicamentos recetados por la red sanitaria pública.

Navarra cuenta en la actualidad con 307 oficinas de farmacia. Desde ahora, todas ellas tienen garantizado un plazo de 10 años de vigencia del concierto que les une con Osasunbidea para la financiación pública de los medicamentos que recetan los servicios sanitarios de la comunidad foral.

El consejero de Salud, Santiago Cervera, puso ayer de relieve que los criterios que introduce el proyecto son novedosos en España. "No hablamos del número máximo de farmacias, sino del número mínimo de oficinas que pueden instalarse para atender las necesidades de la población", señaló. "A partir de esos mínimos, se podrán establecer nuevas farmacias que respondan a la liberalización del sector. Sin embargo, la Administración regulará la apertura concertando sus servicios y específicamente, el pago de la receta a través de las farmacias determinadas como concertadas", agregó.

Para ello, Osasunbidea firmará conciertos en función de un número mínimo de farmacias en cada zona básica de salud, las áreas sanitarias en que se divide Navarra, si bien podrá concertar con otras farmacias para garantizar la viabilidad económica del conjunto de oficinas de cada zona. El número de farmacias concertadas tendrá un tope máximo por zona. "Queremos que haya tantas farmacias en Navarra como sea posible atendiendo a la propia sostenibilidad de las mismas", dijo Cervera. "No pretendemos depauperar el sector ni dañar la economía de las farmacias penalizando su presencia en determinados núcleos. Por contra, queremos que haya tantas farmacias como lo permita la propia facturación y por lo tanto, pueda haber un mayor servicio", precisó.