La Administración española saluda con alivio el tranquilo tránsito al nuevo año

El vicepresidente primero del Gobierno y responsable de la Oficina de Transición, Francisco Álvarez-Cascos, en su balance sobre el "error informático" del siglo, aseguró que "las únicas incidencias reseñables han sido por causas ajenas al efecto 2000". Con todo, hubo algunas, aunque sin consecuencias. La ausencia de alteraciones de la actividad cotidiana en España derivadas de un posible fallo en los ordenadores dio paso a la euforia ayer en los centenares de gabinetes de crisis y seguimiento de las administraciones españolas, empresas públicas y firmas privadas de los sectores esenciales.El Consejo de Seguridad Nuclear registró alteraciones en los sistemas informáticos de las centrales nucleares de Zorita (Guadalajara) y Santa María de Garoña (Burgos) que no tuvieron repercusiones en la producción. Hubo cortes de energía muy localizados, por ejemplo, en un barrio de Barcelona (15 minutos) y en Murcia (un minuto), y bajadas de tensión en Guadalajara, cerca de Zorita, si bien Fomento no vincula este incidente con los registrados en la planta. Los 902 sensores de la Red de Alerta de Radiactividad (RAR), gestionados por Protección Civil, tampoco sufrieron alteraciones.

El Ministerio del Interior sólo destacaba, pasadas 16 horas de la entrada del año, "alguna repercusión en los sistemas de aforos encargados de recopilar los datos de tráfico" en la DGT. También destacó Interior que dos gasolineras ubicadas en Valencia interrumpieron el suministro por problemas informáticos.

Los nueve comités de seguimiento constituidos en los ministerios responsables de los sectores esenciales -energía, transporte y telecomunicaciones, agua, sanidad, distribución de alimentos, economía, interior, protección civil y defensa- se mantuvieron en estado de máxima alerta hasta la medianoche pasada. En el palacio de La Moncloa, el centro de seguimiento central, montado para registrar todos los informes sectoriales, rebajó la tensión a partir del mediodía de ayer, cuando los responsables políticos dejaron paso a los técnicos.

Telefónica sufrió la "congestión habitual de Nochevieja", que afectó a las comunicaciones, sobre todo con el este de Europa, así como un tráfico muy considerable de comunicaciones entre teléfonos móviles.

Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) reseñaba la normalidad en el aeropuerto madrileño de Barajas, donde el primer vuelo del año 2000 de Iberia despegó exactamente a las 0.00 con destino a São Paulo (Brasil). Otros seis aviones de la citada compañía estaban en el aire durante la transición de fechas en los sistemas informáticos. El tráfico aéreo en España fue ayer, sábado, de 1.924 vuelos. Barajas soportó el mayor número (426), seguido de Barcelona (268) y Gran Canaria (241). A la 1.20, AENA ya había comprobado sus sistemas de navegación aérea.

También los trenes de Renfe circularon con normalidad en la noche del viernes. La compañía ferroviaria detuvo en las estaciones cinco convoyes de largo recorrido a medianoche y alivió la espera de los viajeros con cava. A las 5.00, la compañía levantó el sistema de información y reserva electrónica

En puro augurio se quedó otro de los fallos más temidos por el efecto 2000, el de los sistemas financieros. En las dos primeras horas del año se realizaron 15.000 operaciones en los cajeros automáticos, indicó el Ministerio de Economía. Este sector mantendrá la guardia especialmente mañana, primer día laborable de 2000. Hoy abren en muchas ciudades los grandes centros comerciales.