Las ONG exigen que el Plan de Drogas dependa de Asuntos Sociales

La Unión de Asociaciones de Ayuda al Drogodependiente (UNAD), que agrupa a alrededor de 300 organizaciones, y la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD) reclamaron ayer que el Plan Nacional sobre Drogas vuelva a depender del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, informa Europa Press. Ambas organizaciones lamentaron que el Gobierno no aprovechara la puesta en marcha de la nueva estrategia nacional sobre drogas, aprobada en la última reunión del Consejo de Ministros, para tomar esta decisión, que daría al organismo que hoy depende del Ministerio del Interior un carácter "más social" y menos represivo."La eficacia de las políticas de drogas no depende tanto de dónde estén sus responsables sino de cómo trabajan", respondió ayer el portavoz del Plan Nacional sobre Drogas, Javier Hernández, quien subrayó además la importancia que tienen las actuaciones "de control de la oferta". Es decir, de persecución del narcotráfico y, por lo tanto, policiales. Hernández recordó que la nueva estrategia hace hincapié en la prevención -"la estrategia más importante"- y que en la estructura del plan participan otros ministerios (el propio de Trabajo, Sanidad, Educación y Justicia).

El Plan Nacional de Drogas fue creado en 1985 por el Gobierno socialista. Tres años después, cuando se constituyó el Ministerio de Asuntos Sociales, todavía con el PSOE en el poder, quedó en su órbita y sólo con la llegada del magistrado Baltasar Garzón a la dirección del plan, en 1993, pasó a depender del entonces Ministerio de Justicia e Interior, explicó Hernández.

Las ONG no sólo quieren que el plan vuelva a Asuntos Sociales. También consideran que, con la nueva estrategia, el Gobierno ha perdido la oportunidad de crear un órgano específico para garantizar la presencia de estos colectivos en el diseño de las políticas en materia de drogas.

"Hay que implicar a estas organizaciones que son las que tienen que ejecutar las líneas de trabajo" perfiladas por el Gobierno, señaló el presidente de la FAD, Ignacio Calderón.