La policía de Colombia se atribuye la muerte de 60 guerrilleros en un ataque

Más de 60 guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) murieron la noche del martes en bombardeos de la Fuerza Aérea Colombiana cuando se retiraban de una población del sur del país que habían atacado, según aseguró ayer en Bogotá la policía. Otros 40 insurgentes resultaron heridos durante la operación, que se produjo a las afueras de Hobo (departamento del Huila). "Fue una reacción contundente, rápida e impactante", afirmó el director de la Policía Nacional, el general Alfonso Arellano.

Los guerrilleros de las FARC fueron sorprendidos cuando se replegaban de Hobo (a unos 300 kilómetros al suroeste de Bogotá), población en la que entraron el martes por la noche y que atacaron durante cuatro horas. Un policía y un civil murieron durante el ataque a la localidad, que dista 52 kilómetros de la capital huilense, Neiva, según informó el responsable policial.Las sedes locales de la policía, el Ayuntamiento, la Junta Electoral, la telefónica estatal y el Banco Agrario sufrieron graves destrozos tras las deflagraciones de bombonas de gas cargadas de explosivos que los insurgentes utilizaron para reducir a las fuerzas de seguridad.

"En menos de 15 minutos recibimos la asistencia de la Fuerza Aérea", dijo el general Arellano para explicar la acción contrainsurgente. Varios aviones bombardearon los camiones en los que se retiraban los rebeldes, que pertenecían a dos frentes guerrilleros de las FARC, agregó el jefe policial. "Tenemos como saldo positivo para la fuerza pública que fallecieron más de 60 guerrilleros", destacó Arellano, quien agregó: "También tenemos más de 40 heridos [entre la guerrilla], que, angustiados, pedían la ayuda de los campesinos de la región". La operación se produjo a lo largo de la noche del martes al miércoles y fue dirigida por el Ejército, que persiguió a los rebeldes que pudieron escapar de los bombardeos.

Portavoces del alto mando del Ejército en la capital colombiana precisaron, sin embargo, que la institución armada no tiene aún certeza sobre el número de guerrilleros que pudieron morir. El Ejército y la policía de Colombia se encontraban ayer en estado de alerta máxima ante eventuales acciones de la guerrilla.

El ataque a Hobo forma parte de una campaña que las FARC mantienen desde el pasado domingo, cuando asaltaron Juradó, población en la costa del Pacífico, situada a unos 600 kilómetros al noroeste de la capital colombiana. Un total de 23 infantes de marina de la Armada Nacional y un policía resultaron muertos en el ataque guerrillero.

Los nuevos enfrentamientos entre las FARC y las fuerzas de seguridad colombianas se producen en vísperas de la reanudación del diálogo entre el Gobierno y la guerrilla, prevista para hoy.