Barakaldo renuncia a las ayudas del plan Urban y pedirá subvenciones de otros fondos de la UE

Barakaldo ha desistido de las ayudas del programa Urban, el plan europeo para la regeneración de ciudades en crisis que le ha reportado hasta ahora casi 2.000 millones. Consciente de las escasas posibilidades de volver a beneficiarse del plan Urban -ha sido el único municipio vasco que hasta ahora ha accedido a sus ayudas-, las peticiones previstas se canalizarán a partir de ahora a través del Fondo europeo de Desarrollo Regional (Feder). El alcalde, Carlos Pera, reveló que se solicitarán ayudas por proyectos urbanísticos valorados en 3.000 millones.

El plan Urban para Barakaldo fue aprobado por la UE en julio de 1995, empezó a impulsarse a principios de 1996 y concluirá a finales del próximo año. La inversión total rondará los 3.000 millones, de los que el 50% son financiados por este programa europeo. Una de las principales obras ha sido el centro de servicios sociales, inaugurado en mayo pasado.Barakaldo fue una de la docena de localidades españolas, y la única de Euskadi, que accedió al Urban y hasta ahora aspiraba a continuar en este programa, que se renueva cada siete años. "Habíamos presentado la petición, pero al ver los requisitos nos hemos dado cuenta de que teníamos pocas posibilidades y hemos desistido", explicó ayer el alcalde.

Carlos Pera argumentó que el número de ciudades españolas que accederán al nuevo plan Urban se ha reducido de doce a seis . Además, en el País Vasco también se ha presentado Bilbao, con la regeneración de Bilbao La Vieja [el barrio más degradado de la capital].

El alcalde socialista adelantó que, de acuerdo con Bilbao Ría 2000 -la sociedad interinstitucional encargada de la revitalización urbanística de todo el área metropolitana-, se presentará la misma propuesta de ayudas planteada para el programa Urban a los fondos Feder, que forman parte de las ayudas estructurales de la UE y tienen como finalidad acortar las diferencias de desarrollo entre las regiones.

La propuesta se presentará en enero y Pera dijo que la respuesta no se conocerá hasta finales del próximo año. Las ayudas solicitadas persiguen "rematar" las actuaciones realizadas hasta ahora, entre las que destacan la construcción de un nuevo parque y una pasarela en el área de Lasesarre, la recuperación del río Galindo y la urbanización de varias calles.

El alcalde anunció, ya en el ámbito puramente municipal,los dos inminentes planes de construcción de 1.680 viviendas. Uno será sólo de pisos de protección municipal (580) en 83.000 metros cuadrados en los barrios de Rontegi, Retuerto y Lutxana, que contarán además con 834 aparcamientos y 16.000 metros cuadrados para equipamientos y servicios. El segundo plan, a cargo de la iniciativa privada, prevé construir en Beurko un total 1.100 viviendas, de las que 300 tendrán un coste de protección oficial.

Sin pacto hasta marzo

El alcalde, que gobierna en minoría con el único apoyo de su partido, se mostró ayer resignado a no alcanzar un pacto antes de marzo, fecha prevista para las elecciones generales. "No veo posible un pacto estable antes", dijo tras admitir que las negociaciones con el PP están "bloqueadas". Ambos partidos, que iniciaron los contactos en octubre, no se reúnen desde hace más de un mes y el PP ha asumido su papel de oposición.

Pera se mostró abierto a un pacto con el PNV, su socio en las últimas legislaturas, "pero no ha sido posible porque no contaban con el permiso de sus ejecutivas". El portavoz del PP de Barakaldo, Rafael Carriegas, aseguró no entender la resignación de Pera y dijo que la actividad municipal ha estado paralizada estos seis meses.