El Festival de Marionetas de Tolosa acoge las propuestas de 25 grupos en una edición que homenajea a Brasil

Tolosa levanta hoy el telón del Festival Internacional de Marionetas y se abre hasta el próximo 5 de diciembre al mundo de la magia y la fantasía. En su 17ª edición, la muestra confía en 25 compañías titiriteras procedentes de siete países para cautivar al gran público con espectáculos de las más diversas concepciones artísticas. El guiño a la literatura y el homenaje a la marioneta de Brasil marcarán el desarrollo del certamen. El alma mater del festival, Miguel Arretxe, desveló ayer el contenido de la programación de esta nueva entrega de historias fantásticas. Su sello siempre ha estado en la variedad y en esta ocasión tampoco defrauda.

En el reparto de este gran teatro del guiñol figuran espectáculos como El mirlo descalzo de la compañía búlgara Teatro Estatal Targoviste más apropiados para el público infantil, que este año además se convierte en jurado. Arretxe no se cansa de repetirlo: "Las marionetas no son sólo para niños". Y así, propone la historia intimista de Stop y con ánima, del grupo húngaro Mikropodium, que hace una exhibición de la técnica de manipulación de los títeres en una bandeja de arena.

En total, los 24.000 espectadores que prevé la organización podrán asistir a 123 funciones y conocer de cerca la tradición del títere brasileño. Las representaciones de seis compañías de ese país y la muestra Expedición animada a la tierra pappagalli sirven la historia económica, social, política y cultural de esta nación en bandeja de plata.

El festival ha programado espectáculos de tres compañías vascas. "La producción", se excusó Arretxe, "no siempre es tan exuberante". Destacó eso sí, la calidad de los trabajos de Cobaya Teatro, Gorakada y Taun-Taun, que actúan en una edición marcada por el recurso a obras literarias como El principito, de Saint Exuperi. La muestra, que celebrará tertulias y encuentros con titiriteros, ha recurrido a historias conocidas para mostrar las diferentes interpretaciones que permite un mismo texto. El patito feo, de Andersen o Gato manchado y la golondrina Sinhá, de Amado servirán a este propósito.