Telefónica elige el estudio de Lamela para construir su 'ciudad'

La Ciudad Telefónica, de 10.000 habitantes, será construida por el estudio del arquitecto Antonio Lamela, de Madrid, cuyos planos se exponen hasta el día 27 en la sede de la empresa, en Fuencarral, 3. La muestra incluye las propuestas del segundo y tercer premios, adjudicados a Alberto Campo Baeza, con una torre de 350 metros, y la oficina de Rafael de la Hoz, con un conjunto de 12 edificios. El proyecto contará con 271.000 metros cuadrados edificados.

La exposición de los premios del concurso restringido de la Ciudad Telefónica, para las oficinas centrales y con una capacidad para 10.000 empleados, que se levantará en la zona norte de Madrid, entre la M-40 y la N-I, se ha limitado a los tres primeros premios, los conseguidos por Antonio y Carlos Lamela, Alberto Campo Baeza y Rafael de la Hoz Castanys.En el concurso habían sido invitados, además, Ricardo Bofill, Francisco J. Sáenz de Oíza, Javier Carvajal, Juan Navarro Baldeweg y Miguel Oriol. Rafael Moneo declinó la invitación por su agenda y Santiago Calatrava no entregó su propuesta. En el jurado participaron los arquitectos Sverre Fehn, premio Pritzker, y Peter Zumthor, premio Mies van der Rohe, junto a técnicos del Ayuntamiento y Comunidad de Madrid y directivos de Telefónica.

La Ciudad Telefónica se construirá en el PAU de Las Tablas, en una parcela de 170.000 metros cuadrados (una vez y media la extensión del parque madrileño del Retiro), cerca del parque empresarial de La Moraleja. El edificio contará con 271.000 metros cuadrados, de los que 191.000 serán sobre rasante, 20.000 destinados a servicios y 60.000 bajo rasante (con 2.900 plazas de aparcamiento). Aunque el concurso de ideas no establece el presupuesto, la inversión alcanza los 54.000 millones de pesetas. Telefónica no ha facilitado material gráfico sobre los proyectos.

"Es un nuevo concepto de una ciudad de uso terciario en el siglo XXI, con la aportación de una arquitectura e ingeniería españolas", declara Antonio Lamela. Plantea una Ciudad de las Comunicaciones en un único edificio "de imagen innovadora e hito urbano" con forma de herradura sinuosa, en distintos planos hasta las 16 plantas. Lamela destaca la arquitectura suspendida, de acero y cristal, en una ciudad compacta, flexible y lineal, con cuatro barrios: trabajo, salud, ocio y cultura, y soluciones de respeto medioambiental. Incluye tres auditorios, una clínica y un hotel.

Lamela señala que el proyecto estará redactado en un año y espera que su construcción no esté vinculada a la presidencia de Juan Villalonga. La ciudad va a permitir a la compañía reducir de 76 a 20 el número de edificios en Madrid, con un ahorro de 4.000 millones anuales sólo en alquileres.

El segundo premio del concurso es obra del arquitecto Alberto Campo Baeza, que presenta una torre cuadrada de 350 metros (con 72 plantas), la más alta de España. Esta ciudad vertical tiene 333 metros desde el podio, con un cuerpo de seis módulos (cada uno de 12 plantas) y una cabeza para la alta dirección. Campo Baeza defiende la idea de torre "para liberar el terreno y potenciar la naturaleza y economía de medios al concentrar circulaciones y estructura en una sola edificación unitaria". En la exposición figura una gran maqueta del rascacielos de acero y cristal, rodeado de un bosque de especies autóctonas.

La propuesta de Rafael de la Hoz es de una "ciudad comunicada", con un edificio singular situado en una plaza central y alrededor otros 11 edificios de nueve plantas cada uno.