"Milosevic no entregará el poder aunque pierda las elecciones"
El general Momcilo Perisic, de 55 años, ex jefe del Ejército de Yugoslavia, colgó el uniforme hace ahora un año, cuando el presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, lo destituyó de su cargo. En una arenga en un cuartel, Perisic afirmó que Yugoslavia no puede enfrentarse en una guerra contra todo el mundo. Estas palabras y otras discrepancias le costaron el puesto.Tras unos meses de silencio, Perisic saltó a la vida pública de nuevo con declaraciones en contra de Milosevic y su régimen. Ahora, el ex general ha fundado el Movimiento por una Serbia Democrática, que trata de acabar con el régimen de Milosevic, a quien Perisic considera "un peligro para la integridad de Yugoslavia". Según Perisic, existe un peligro de guerra civil, porque Milosevic no entregará el poder aunque pierda las elecciones, y asegura que el conjunto del Ejército está contra el gobernante de Belgrado.
Perisic concedió una entrevista a EL PAÍS en las oficinas de su Movimiento por una Serbia Democrática en Belgrado, con la condición de revisar la versión de sus palabras para autorizar su publicación.
Pregunta. ¿Existe salida para la situación de Serbia?
Respuesta. Hay dos maneras de salir de la crisis: la pacífica, por vía de las elecciones, y la otra, menos pacífica y menos legal, por la vía de las manifestaciones. Lo más deseable serían las elecciones pacíficas, unas elecciones anticipadas, pluripartidistas y libres. Si este régimen se queda en el poder, la situación seguirá como hasta ahora, con una evolución pésima. Si no hay elecciones existe el peligro de que se vaya Montenegro o de que lo echen. Digo echen porque el Gobierno actual no acepta los resultados electorales de Montenegro y está dando los pasos para expulsar a Montenegro. Si se queda el Gobierno actual corremos el peligro de no resolver la cuestión de Kosovo dentro de Yugoslavia. Si se va Montenegro se pone en tela de juicio la posición de Sandzak , que es la conexión entre la federación croata-musulmana con Kosovo y Albania. También surgirá la cuestión del estado de Voivodina . Si se queda en el poder el régimen actual habrá más daños para la integridad territorial de Yugoslavia y la veremos más aislada todavía. El régimen ha perdido todo prestigio en el mundo, está aislado y pierde sus posiciones dentro del país. Si se queda en el poder seguirá poniendo en peligro la integridad de Yugoslavia, cuyo territorio seguirá disminuyendo. La oposición tampoco cuenta con el prestigio internacional y su prestigio aquí no es significante, porque en los años 1996-1997 había bastante energía como para acabar con el Gobierno actual, pero los líderes de la oposición, al conformarse con las ofertas del Gobierno, perdieron esa energía y no lograron su objetivo. Muchas veces colaboraban con el Gobierno actual, y así perdieron la confianza del pueblo.
P. ¿Puede el Ejército echar a Milosevic?
R. Por miedo al comportamiento del Ejército, entre otras cosas, Milosevic me destituyó a mí. Llevó a la cúpula militar a gente que le es muy fiel. Pero el Ejército, en su conjunto, está contra Milosevic, porque él tiene la culpa del mal uso del Ejército en la antigua Yugoslavia y de la utilización errónea del Ejército en la última guerra. El estado del Ejército y su situación económica son gravísimos. Esto tiene consecuencias negativas, porque el Ejército es la única institución federal que todavía funciona en el territorio de toda Yugoslavia. Es precisamente el Ejército el que obtuvo las condiciones para la creación de la tercera Yugoslavia, preservó la unidad, impidió los conflictos interiores en los años 1996-1997 en Belgrado y 1997-1998 en Podgorica , impidió que la guerra de Bosnia y Croacia se derramase por Yugoslavia. Era totalmente apolítico, trabajaba por el interés de todos, y no sólo del régimen. Era, y sigue siendo, el factor de estabilidad en los Balcanes y en Yugoslavia, el único factor de cohesión entre Serbia y Montenegro. Los oficiales se dan cuenta del peligro que nos amenaza, y especialmente de un abuso por parte de Milosevic. Por eso es poco probable que se produzca ese abuso. Ellos sirven al pueblo, y no a los partidos gobernantes, aunque algunos generales aparecen en público como portavoces del SPS y la JUL .
P. ¿Considera una guerra civil como una posibilidad real?
R. Conociendo a Milosevic y a la cúpula estatal, a Mira Markovic, a Seselj , ellos no van a entregar el poder, ni en el caso de perder las elecciones. En ello les ayudó mucho la comunidad internacional, por no haberles dejado ninguna salida. Públicamente proclamaron a Milosevic y cuatro personas más criminales de guerra. Si hay cambios aquí se les pedirán cuentas. Estas perspectivas les dan miedo y quieren quedarse en el poder a toda costa y, por medio del poder, tener los mecanismos de defensa. La situación es todavía peor si se tiene en cuenta que están acusados los jefes del Ejército y de la policía que encabezan las instituciones armadas. Claro, la oposición no tiene armas. Si el régimen se ve en peligro podría causar conflictos. Eso podría provocar disturbios más amplios y acabar en una guerra civil, con consecuencias enormes, porque ésta sería una verdadera guerra civil dentro de un mismo pueblo. En la antigua Yugoslavia se trataba de una guerra basada en la religión y la nación. Milosevic podría también provocar conflictos en Montenegro, pero no entre serbios y montenegrinos, sino entre los mismos montenegrinos. Algunas acciones suyas nos indican que podría, desestabilizando la situación en Montenegro, crear un caos para ganar tiempo. Después llegaría como artífice de la paz y prorrogaría su permanencia en el poder hasta el fin del mandato.
P. ¿Cuáles fueron los motivos reales de su destitución?
R. Primero, yo tenía un punto de vista diferente sobre la solución del problema de Kosovo. Ofrecí un plan para mantener Kosovo dentro Serbia y luchar contra el terrorismo albanés, pero sin luchar con la comunidad internacional. Milosevic se negó a aceptar mi plan. Él siguió el suyo, cuyo epílogo conocemos. Lo mismo que le dije a Milosevic de lo malo que era su plan, lo dije también a Solana y a los generales Naumann y Clark sobre sus planes para lograr sus objetivos bombardeando nuestro país. No me escucharon ni unos ni otros, y el resultado se conoce.
P. ¿Cree que Kosovo está perdido para siempre?
R. Si se queda el régimen actual, entonces, sí. Si logramos democratizar Serbia, si alguien nuevo gana las elecciones, alguien con inclinaciones democráticas, entonces, no. En ese caso seguramente se resolverá el problema dentro del marco de Serbia y Yugoslavia.
P. ¿No sería deber patriótico del Ejército decir ya: "¡Señor Milosevic, váyase!"?
R. ¿Quién se lo va a decir? ¿Cómo se lo va a decir? Yo, que hasta casi ayer fui el comandante del Estado Mayor, no tengo la posibilidad ni de decir una frase en la televisión estatal y, por desgracia, tampoco en la televisión Studio B, que está en manos de la oposición, porque el régimen me considera enemigo y la oposición me ve como competidor. El bloqueo de medios es tal que en los medios estatales sólo pueden aparecer los que comparten los puntos de vista del régimen.
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