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Mitchell aplaza hasta el lunes las estancadas conversaciones del Ulster

George Mitchell, el mediador estadounidense para el Ulster, ordenó ayer una pausa en las conversaciones para la paz en Irlanda del Norte hasta la próxima semana, pues éstas han alcanzado "la fase final y más crítica". "He pedido a las dos partes parar durante el fin de semana y reflexionar sobre la magnitud de las decisiones que tienen que tomar. Nos reuniremos de nuevo el lunes por la mañana", dijo Mitchell. El Sinn Fein, mientras, insta a los unionistas que aclaren su posición frente a la oferta realizada por el IRA esta semana.

El mediador Mitchell anunció la interrupción de las negociaciones poco tiempo después de que el primer ministro, Tony Blair, dijera que un acuerdo de paz en Irlanda del Norte está al alcance de la mano y exhortara a las partes a no abandonar sus esfuerzos. "Nunca hemos llegado tan lejos como ahora. Nunca hemos estado tan cerca de un acuerdo duradero en Irlanda del Norte. Está aquí, a nuestro alcance", dijo Blair en la cumbre de la Commonwealth, en Suráfrica.Sin embargo, en Belfast las conversaciones de paz quedaron el jueves por la tarde en un estado crítico, entre señales conflictivas respecto a la reacción de los unionistas probritánicos a la propuesta para reactivar el acuerdo de Viernes Santo de 1998.

Mitchell declaró que una pausa para reflexionar era necesaria. "Reconozco que el proceso está durando más tiempo de lo que se había planificado originariamente. Sin embargo, dada la gravedad de lo que está en juego, es apropriado tomarse el tiempo necesario para considerar cuidadosamente estos importantes asuntos", dijo el mediador de EEUU.

Mitchell ha luchado durante diez semanas para resolver el estancamiento del proceso de paz debido a las exigencias sobre el desarme del Ejército Republicano Irlandés (IRA) y las nuevas estructuras políticas a instaurar en la provincia británica.

Aún antes del anuncio de Mitchell, fuentes del Partido Unionista, que encabeza David Trimble, habían asegurado que aplazarían su consideración de la fórmula de compromiso hasta el lunes. El Sinn Fein, brazo político del IRA, exigió a los unionistas que aclaren si aceptarían la fórmula por el Ejército Republicano Irlandés.

"Queremos -y estoy seguro que todos quieren- que los unionistas digan que sí. Pero necesitamos conocer su respuesta", declaró Gerry Adams, líder del Sinn Fein, antes de que empezaran las negociaciones ayer.

El primer ministro irlandés, Bertie Ahern, descartó que el Partido Unionista hubiera rechazado formalmente la fórmula de rescate que incluía la oferta del IRA destinada a calmar la preocupación sobre una eventual reanudación de la violencia.

Y los unionistas, el principal partido de la comunidad protestante que está a favor de un Gobierno desde Londres, negaron que sus políticos hubieran descartado el acuerdo de rescate.

Gerry Adams se declaró, al salir de las negociaciones el jueves, "profundamente decepcionado" al enterarse del no de los unionistas a la propuesta del IRA.

El acuerdo de rescate contendría concesiones mutuas de ambas partes, que conducirían a la creación de una coalición gubernamental entre la IRA y el Sinn Fein.

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