_
_
_
_
_

Las industrias valencianas apenas gestionan sus residuos

En 1997, la Comunidad Valenciana generó 2.048.000 toneladas de residuos sólidos urbanos, a razón de 1,40 kilos diarios por habitante. De esa cantidad sólo se recicló un 11,6%. Estas cifras no incluyen residuos industriales. Aplicar correctamente en España la directiva europea sobre vertido de residuos, promulgada el pasado 26 de abril, exige un "gran esfuerzo inversor" a las distintas administraciones públicas, según se evidenció ayer en el transcurso de una jornada sobre esta norma organizada por la Confederación Empresarial de la Provincia de Alicante (Coepa), para animar inversiones en este terreno.Básicamente, esta directiva establece una serie de procedimientos que deben seguirse a la hora de autorizar la apertura de un vertedero. Asimismo, estipula las normas que deben vigilarse respecto a su correcto funcionamiento y cuáles son las garantías que debe cubrir su cierre. El Plan Nacional de Residuos Sólidos prevé una partida presupuestaria para aplicar la nueva norma en territorio español.

Según Javier Serrano y Miguel Riaño, asociado y socio de Garrigues & Andersen, respectivamente, y ponentes en las jornadas, los empresarios y los responsables de política medioambiental de las comunidades autónomas han aprendido que "los residuos no se pueden gestionar alegremente".

No es un problema baladí: las empresas e industrias de la Comunidad Valenciana presentan, por lo general, una absoluta precariedad a la hora de gestionar sus residuos. Y eso es algo que va en detrimento no sólo de los intereses de la comunidad, sino de sus propios beneficios. De hecho, ya hay empresas que prefieren destinar parte de sus inversiones a reciclar sus residuos para reutilizarlos o incrementar su valor añadido, en vez de dejarlos sin tratar o subcontratar los servicios de otra empresa.

Los residuos dan dinero

Frente a esta tendencia en alza de las empresas que crean sus propias divisiones de gestión medioambiental, se hallan las firmas cuya actividad principal es la gestión de la basura. Si bien es cierto que la mayor parte de los gestores autorizados son transportistas, hay compañías españolas boyantes como Befesa y Rosroca. Ambas cotizan en Bolsa con buenos resultados. Otras, como FCC, han comenzado a abrirse mercado en plazas extranjeras como Chile.

Por lo que respecta a los residuos sólidos urbanos, Miguel Riaño calificó de "crucial" la separación de la basura en origen, una tarea que debe asumir el ciudadano en su domicilio. Reconoció que ese aspecto "ha cambiado", aunque matizó que "queda mucho camino por recorrer". Sin embargo, echa en falta una mayor implicación de las administraciones para que la conciencia ecológica no suponga molestias para el ciudadano. "Podría haber un servicio semanal de recogida de vidrio y papel, aunque resultara más costoso", apuntó.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_