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Los promotores del centro lúdico-comercial de Abandoibarra esperan abrirlo en octubre de 2001

Los promotores del centro lúdico-comercial de Abandoibarra, uno de los proyectos más costosos de la nueva área de expansión de Bilbao con una inversión prevista de 8.000 millones, ya tienen fecha para su apertura. Será, si no fallan de nuevo las previsiones, en octubre de 2001. El arquitecto estadounidense Robert Stern, que sustituyó a primeros de año al británico Peter Coleman, presentará el diseño del proyecto más controvertido de Abandoibarra en el plazo de un mes. La intención de los promotores es que la construcción comience en el primer trimestre de 2000.

El centro, denominado Ría 21, iba a ser la primera actuación de Abandoibarra, puesto que la obra se adjudicó en octubre de 1997. Pero la polémica que ha suscitado su construcción ha acumulado retraso tras retraso: por distintos motivos ha sido rechazado por el Colegio de Arquitectos Vasco-Navarro, vecinos, varios partidos políticos (IU, HB e ICV) y, sobre todo, los comerciantes bilbaínos debido a la competencia que supone.Su diseño final será presentado públicamente en el plazo de un mes, según asegura la promotora del proyecto, la inmobiliaria Filo, perteneciente al grupo Max Center. Pero diferirá sustancialmente del boceto que preparó hace dos años su primer autor, el arquitecto Peter Coleman. Entonces se contemplaba un edificio de cuatro plantas con un espectacular tejado inclinado que superaba en 20 metros la altura del puente de Deusto, situado al lado de su emplazamiento. Con 20.000 metros cuadrados de superficie, iba a albergar ocho salas de cine, un centenar de tiendas y un supermercado, instalaciones que parece se mantendrán en el proyecto definitivo.

Discrepancias con Pelli

La oposición del Partido Popular, entonces en el equipo de gobierno en Bilbao, obligó a modificar el proyecto e introdujo la necesidad de que contara con la aprobación de César Pelli, el urbanista argentino encargado de todo el diseño urbanístico de Abandoibarra. Coleman y Pelli no lograron superar sus discrepancias sobre el proyecto de Ría 21, puesto que el británico trabajaba con la idea de un centro de periferia -al estilo del parque Artea, en Leioa- en vez de una instalación más urbana. Ante el nuevo parón que suponían estas diferencias de criterio, la inmobiliaria Filo decidió a principio de año recurrir a otro arquitecto, Robert Stern.

Éste trabaja en un complejo cuya denominación también cambió el verano pasado para frenar la polémica: lo que era "centro comercial" pasó a llamarse "lúdico-comercial". La superficie total se mantendrá en cerca de 20.000 metros cuadrados, así como los usos previstos. "Nuestra idea es empezar las obras en el primer trimestre del 2000. La apertura sería para octubre del 2001, y no porque los trabajos no puedan terminar antes sino porque los centros comerciales hay que abrirlos en primavera u otoño. En otras épocas no es rentable", explica Adrián Orbea, secretario general de Filo.

Orbea no quiso cuantificar la inversión total del centro Ría 21 "porque dependerá del tipo de proyecto final", aunque admitió que rondará los 8.000 millones de pesetas. De ellos, 1.500 ya han sido abonados a la sociedad Bilbao Ría 2000, encargada de la gestión urbanística de Abandoibarra, por la compra del suelo, por lo que los promotores están interesados en el inicio inminente de los trabajos.

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Ría 21 se situará entre el puente de Deusto y el nuevo Palacio Euskalduna, junto a la nueva avenida de Abandoibarra y justo delante del hotel de lujo y los cuatro bloques de viviendas que está previsto construir.

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