El paro cae al 10%

Sin duda, la caída del paro es el dato económico más brillante de la legislatura que acaba en Cataluña. Se han creado 259.000 empleos nuevos en cuatro años y la tasa de paro ha bajado del 17% al 10,45% de la población activa, un nivel similar al de Alemania (10,1%) y Francia (10,2%). La tasa de paro es muy inferior en Cataluña que en el conjunto de España, donde alcanza al 15,63% de los activos, y es la más baja en 20 años.Razones de tipo económico, estadístico y legislativo explican el descenso del paro. La principal es que el crecimiento económico ha estado por encima del 3% desde 1996 y ha permitido crear un promedio de 60.000 empleos netos al año. Una segunda razón es el final de la generación del baby boom, en la que se produjeron nacimientos masivos en los años sesenta, que antes elevaban la población activa y jugaban en contra del descenso del paro, mientras que ahora el descenso de la natalidad empieza a actuar a favor, ya que la población activa apenas crece y permite que el nuevo empleo se transforme en menos paro. Además, la reforma laboral pactada en 1997 entre el Gobierno y los sindicatos abarató el despido para los nuevos contratos fijos y dio incentivos para convertir a trabajadores eventuales en fijos.

Las cifras del paro aún son mejores si se cuentan sólo las personas inscritas en las oficinas de empleo en busca de trabajo. Los últimos datos señalan que en Cataluña hay 320.000 personas que dicen que quieren trabajar, pero sólo 170.303 se han inscrito en las oficinas de empleo. Esta diferencia es la que arroja una tasa de paro del 10,45% en el primer caso y del 6,38% en el segundo. Con todo, la primera tasa, que sale de la Encuesta de Población Activa (EPA), es la homologada internacionalmente para medir el paro.

El consejero de Trabajo, Ignasi Farreres, destaca: "La evolución del mercado de trabajo en los últimos años ha sido positiva. La creación de puestos de trabajo está por encima de los 272.000 si utilizamos los datos de la EPA (...) y en más de 386.000 si tenemos en cuenta los afiliados a la Seguridad Social. El conjunto de políticas activas aplicadas por la Generalitat, junto a la evolución de la coyuntura económica, nos ha permitido un aumento considerable de las personas ocupadas y nos permitirá incrementar los esfuerzos para los colectivos más desfavorecidos".

Pero la cifra global de paro esconde realidades muy dispares. Por un lado, el 28% del empleo es temporal y por otro el desempleo se ceba en mujeres, jóvenes y personas que hace más de un año que perdieron su puesto de trabajo.

En cambio, el paro masculino no es demasiado elevado. Hay 1.451.000 hombres ocupados en Cataluña, 115.000 más que al empezar 1996, lo que hace que sólo el 7,10% de los hombres sufra el desempleo. Si se cuentan los inscritos en las oficinas de empleo, la tasa de paro cae hasta un espectacular 4,6%, muy cerca del 4% que los expertos consideran una situación de pleno empleo.

Entre las mujeres, la tasa de paro dobla la de los hombres y llega al 15,16%. Si se cuentan las inscritas en las oficinas de empleo, la tasa de paro femenina es del 9%. Pero el empleo ha crecido más entre las mujeres que entre los hombres: hay 123.000 mujeres más trabajando que a principios de 1996. El avance del empleo femenino ha sido grande. Hay 940.000 mujeres ocupadas en Cataluña cuando hace cuatro años había 802.000 y hace 10 sólo 665.000. Aun así, las mujeres siguen sufriendo agravios laborales y todavía llegan denuncias a los juzgados de que algunas empresas las discriminan salarialmente.

Entre la población juvenil, la tasa de paro es del 23% y sólo el 5,2% está inscrito en las oficinas de empleo. El diputado del PSC Josep Maria Rañé afirma que la estadística oculta a 40.000 jóvenes que no constan en las oficinas de empleo y sí en el Servicio Catalán de Colocación. "Es poco creíble que sólo el 5% de la población que tiene hasta 25 años esté en desempleo. Lo que ha ocurrido desde que la Generalitat tiene competencias sobre el registro de parados es que hay problemas informáticos y no todos los parados que se apuntan en el Servicio Catalán de Colocación quedan registrados en las oficinas de empleo", dice Rañé.

El desempleo en Cataluña no sólo es muy distinto según el sexo o la edad, sino que varía mucho según las zonas. Hay comarcas donde los parados registrados arrojan unos niveles de paro próximos a cero.

Los sindicatos recuerdan, además, que el crecimiento del empleo oculta un gran nivel de empleo eventual. El 28% del empleo total en Cataluña es eventual. La situación, sin embargo, ha mejorado. Hace siete años la precariedad llegó a su punto máximo con el 33% de los trabajadores activos con contratos eventuales.

La mejora se ha producido tras la reforma laboral. Con la reforma hay 350.000 nuevos trabajadores fijos, unos por la conversión de temporales y otros por los nuevos contratos fijos con despido más barato -33 días por año en lugar de 45-. Estos contratos han tenido bonificaciones de cuotas a la Seguridad Social a cargo del Estado. La reforma no ha impedido seguir estableciendo contratos fijos sin bonificaciones a la Seguridad Social, es decir, con las mismas condiciones de despido que antes. Se han creado 110.000 empleos fijos de este modo.