Inventores

NEGRITASCádiz ha sido siempre tierra de grandísimos inventores. Fue el representante artístico Pomponio Mela quien inventó la comisión del 10% cuando llevaba a la bailarina gaditana Theletusa a bailar ante el mismísimo César. Al menos, eso cuenta Chano Lobato, a quien se lo dijo, parece ser, Enrique el Morcilla, quien, a su vez, se lo escuchó a Ignacio Espeleta, que heredó la anécdota de Pericón de Cai, y ahí se pierde cualquier pista tangible. En el siglo pasado, las coplas aludían ya al famoso unto sin sal, invento, al parecer, de procedencia local, pero que quedó reducido a la nada cuando otro investigador de vanguardia le quitó la sal al pellejo, que se vendía para darle sabor a los guisos. Hoy, la ciencia adelanta que da vértigo y las nuevas generaciones gaditanas no se quedan atrás. Pedro Palma, un ciudadano de Villamartín (Cádiz) ha patentado un nuevo modelo de ajedrez. Está registrado como Super ajedrez by Palma. En vez de ocho escaques en cada lado del tablero, hay 16. Se juega con 14 peones, cuatro torres, cuatro alfiles, cuatro caballos, un rey y una reina, que como la madre de cada uno, sólo hay una. Un investigador gaditano, Antonio Marfil Palomo afirma haber dado con la tecla para evitar el efecto 2000 en los ordenadores de todo el mundo. Ha registrado su programa, el ISA, que permite identificar el 00 como 2.000. Dice que ha intentado ponerse en contacto con Bill Gates, sin éxito, para explicarle que lo que hay que hacer es atacar al sistema operativo y no al software. Una más: dos peritos caligráficos, el gaditano Vicente Macías y el holandés Joaquín Villar Loopstra, se han ingeniado un sistema que permite verificar las firmas. Instituciones europeas están interesadas en el invento, que permite establecer incluso las variables psicológicas de los firmantes. Sin oficina de patentes de por medio, Agustín González, El chimenea, un Ungenio Tarconi a la gaditana, ha conseguido el reconocimiento popular a sus dos innovaciones más célebres: el rompechícharos y el partebabetas. Todo junto. Queda acreditado, pues, el dinamismo del gremio de inventores gaditanos, que demuestra imaginación y no como Telefónica, que le ha copiado a Pedro Pacheco su lema de las últimas elecciones municipales para su campaña publicitaria y se dirige a sus potenciales clientes con un arrogante "¿Quién si no?" En boca del alcalde de Jerez sonaba más natural.