El "tremendo daño" de ETA

Los hosteleros vascos atribuyen a tres motivos principales el crecimiento de la actividad hotelera en la comunidad autónoma: el denominado efecto Guggenheim, el actual despegue económico y la tregua de ETA. Ángel Gago señaló la violencia como un "problema muy grave" para las empresas hoteleras y el desarrollo turístico en Euskadi puesto que ha creado "una profunda antipatía en muchas capas sociales del Estado. El daño provocado no sé si es irreversible, pero sí tremendo". "La tregua de ETA, mientras no sea definitiva, también supone la existencia de una amenaza permanente para el mantenimiento de este desarrollo", añadió. A juicio de Gago, Euskadi debería "haber tenido siempre" la participación que ha alcanzado ahora en el mercado turístico de España al disponer de "atractivos turísticos y gastronómicos y con calidad humana". El secretario general de los hosteleros vizcaínos se mostró partidario de establecer "atractivos complementarios" al Museo Guggenheim. "Está huérfano y necesitamos otros atractivos para que la gente se quede más tiempo". Gago calificó las estancias cortas como uno de los puntos débiles de la actividad hotelera en Euskadi. Los datos estadísticos reflejan que los visitantes se quedan en los alojamientos una media inferior a dos días (en 1992 era de 1,79 y el pasado año fue de 1,85), mientras que en España casi se alcanzan las cuatro jornadas.