_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Pensiones : una espesa cortina de humo JOAN COSCUBIELA

Joan Coscubiela

Estamos asistiendo a una inmensa ceremonia de la confusión creada por el anuncio del Gobierno catalán de dar una paga de entre 6.000 y 8.000 pesetas a las personas que cobran las pensiones no contributivas. Las acusaciones de electoralismo de unos y de insensibilidad social de otros centran un debate en el que lo más significativo es la inmensa cortina de humo sobre los temas de fondo. Como parece que ya es evidente que ni se trata de una subida de las pensiones -es una minipaga este año y nada más-, ni beneficia a todas las personas con prestaciones sociales bajas -discriminando a los que cobran el SOVI o la renta mínima de inserción- ni permite recuperar poder adquisitivo -porque no se consolida en la nómina de los pensionistas-, creo que puede ser útil intentar que emerjan los verdaderos problemas de fondo. Comencemos por constatar una evidencia. En este tema las polémicas entre PP y CiU se refieren a la letra pequeña -se está hablando de un máximo de 500 millones- y a los símbolos; en cambio mantienen un fuerte acuerdo en las principales cuestiones de fondo. Por ejemplo, que no hay que ampliar el gasto social para evitar problemas de déficit público y en cambio sí reducir la fiscalidad de las rentas del capital, o la negativa a ampliar la cobertura de los parados de larga duración con cargas familiares y sin subsidio, o la otra negativa a que los pensionistas del SOVI se beneficien de los complementos a las pensiones mínimas, a pesar de tratarse de personas que han cotizado a la Seguridad Social y hoy cobran igual o incluso menos que los perceptores de las pensiones no contributivas. Hay una buena lista de coincidencias entre PP i CiU que en algún tema alcanza un nivel de indistinción. De todos, puede que el más sangrante sea la congelación del salario mínimo, que es el punto de referencia de algunos salarios y de muchas prestaciones y servicios sociales y que en los últimos 15 años ha sido actualizado incluso por debajo del IPC real. Como no podía ser menos, la polémica sirve para un supuesto debate en clave aparentemente nacional. Me refiero a las acusaciones de ruptura de la solidaridad interterritorial vertidas por el PP y a la utilización por parte de CiU del IPC catalán. Vaya por delante que no creo que exista ningún impedimento social, político o constitucional que impida que Cataluña si así lo decide su ciudadanía cree su propio nivel de prestaciones, complementario. No es el ejercicio del autogobierno por parte de la sociedad catalana lo que puede poner en peligro la solidaridad o el consenso social. El riesgo y la ruptura real en España se está produciendo entre personas y sectores sociales, que no entre naciones o regiones. En los últimos años se ha reducido significativamente el diferencial de rentas entre territorios y no ha sucedido lo mismo entre sectores sociales, que en algunos casos han visto cómo se abría la brecha de ingresos y calidad de vida. Otra cosa es que hasta ahora existía un fuerte acuerdo para una cierta distribución de competencias y papeles. Así se acordó que las pensiones no contributivas tuvieran una regulación legal y financiación estatal y una gestión autonómica. Y si quiere cambiarse este estado de cosas que se plantee claramente, porque es posible socialmente y hay cobertura constitucional suficiente para hacerlo. Lo que no puede hacer, primero la Junta de Andalucía y ahora el Gobierno catalán es tener verdaderos boquetes en la cobertura de aquellos servicios sociales de los que son responsables y intentar lavar esta ropa sucia con la cortina de humo de una minipaga. Para terminar de rizar el rizo aparece como argumentación fuerte de la propuesta de CiU el diferencial entre la evolución estadística del IPC y su desglose en Cataluña. El tema del IPC y su posible evolución asimétrica es un tema importante. En los últimos 20 años la evolución ha tenido ciclos distintos que se compensaban, pero es posible que en el futuro ese diferencial se mantenga porque las razones de fondo son profundas, tienen que ver con la

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_