Álava y Castilla y León hablarán sobre Treviño por primera vez en casi dos años

Lo que no consiguió un mandato del Senado se logrará gracias a la afinidad política entre los Gobiernos de la Diputación alavesa y la Junta de Castilla y León. El lunes se reunirán en Vitoria el diputado general de Álava, Ramón Rabanera, y el consejero de Presidencia de la Junta, Jesús Mañueco, ambos del Partido Popular, en el primer encuentro entre responsables políticos vascos y castellanos en los últimos dos años para hablar acerca del Condado de Treviño. Los contactos entre ambas instituciones quedaron suspendidos en octubre de 1997, cuando se produjo la segunda y última reunión de la Comisión Mixta formada por las Administraciones vascas (Gobierno y Diputación de Álava) y castellano-leonesas (Junta y Diputación de Burgos). Desde entonces y sobre todo tras la consulta popular celebrada en marzo del año pasado, las relaciones se han enturbiado. Ahora que el PP ha accedido al Gobierno de la Diputación alavesa, se ha desbloqueado la situación, aunque el encuentro se producirá margen de la Comisión mixta. En la reunión, se tratará sobre los problemas que afectan a Treviño, aunque puede haber diferencias en la interpretación de los contenidos. Según adelantó ayer Jesús Mañueco, el lunes sólo discutirá con Rabanera sobre "cómo buscar soluciones que mejoren la calidad de vida y el desarrollo de Treviño". El consejero en ningún momento se refirió al conflicto político. El diputado general de Álava, por su parte, es partidario de la incorporación del condado al País Vasco, aunque en los últimos días se ha mostrado favorable a "despolitizar" la discusión sobre el enclave burgalés. En las últimas elecciones municipales, los candidatos de las listas independientes ganaron por mayoría absoluta en los dos ayuntamientos de Treviño. Ambos defienden que el condado se desanexione de Burgos. En la reunión el lunes también se tratará la posibilidad de que el enclave pueda incorporarse a la solicitud de ayudas agrarias junto con Euskadi, algo a lo que Castilla y León no se opone.