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EL INCENDIO DE SAN LORENZO DE EL ESCORIAL

La fiscalía abre una investigación para aclarar si el incendio oculta intereses urbanísticos

El incendio del monte Abantos, que arrasó 450 hectáreas de una zona de alto valor ecológico, sigue candente. La fiscalía ha abierto una investigación para dilucidar si detrás del fuego se esconden intereses urbanísticos. La medida responde a la denuncia presentada ayer mismo por un grupo de vecinos de la urbanización Montescorial, una de las más próximas a la zona incendiada. Fuentes de la fiscalía señalaron que la denuncia mantiene que el fuego fue intencionado y que su fin era conseguir una recalificación. Esta posibilidad ha sido negada por la Comunidad.

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Tanto el consejero de Medio Ambiente, Carlos Mayor Oreja, como el propio alcalde de San Lorenzo de El Escorial (11.000 habitantes), José Luis Fernández Quejo, del PP, han señalado que el plan urbano de la localidad excluye toda recalificación urbanística en esta zona protegida. La Guardia Civil, además, sostiene que el fuego se debió a una imprudencia motivada por el abandono en el paraje del fondo de una botella que, debido al efecto lupa, provocó el incendio.La denuncia vecinal, siempre según fuentes de la fiscalía de Urbanismo y Medio Ambiente, ofrece una versión bien distinta. Mantiene, por ejemplo, que la finca el prado de la Era, que se quemó el viernes, sufrió dos intentos de incendio el año pasado. El primero ocurrió el 10 de agosto de 1998, y en esta ocasión, según manifestaron los denunciantes a la fiscalía, dos jóvenes salieron corriendo de la citada finca tras prenderle fuego a los pastos. Esta versión añade que este siniestro se registró dos días después de que se presentaran numerosas alegaciones contra la recalificación de la parcela que iba a permitir construir una carretera y levantar nuevas casas a sus lados.

El segundo presunto incendio sufrido por el prado de la Era ocurrió -según aseguran fuentes de la fiscalía que manifestaron los vecinos- el 30 de agosto del año pasado y tenía tres focos. Esta versión también sostiene que la finca ha sido vendida recientemente. La asociación ecologista Greenpeace da crédito a la denuncia vecinal. "Ya hace un año intentaron quemar la zona, entre litigios para la construcción de nuevas viviendas. Sólo es una sospecha, aunque es mucha causalidad que el foco del incendio del pasado viernes esté muy próximo al del año pasado", afirmó el portavoz de Greenpeace, Mario Rodríguez. El edil socialista de San Lorenzo e ingeniero forestal, Miguel Ángel Hontoria, no se cree que la causa del incendio sea el efecto lupa de un vidrio roto, tal y como apuntó la Guardia Civil. Sospecha que el fuego pudo ser provocado porque a los pies de una encina los bomberos encontraron un palé de madera quemado, de los que se usan para el transporte de material de construcción.

El presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, del PP, salió al paso de estas sospechas el domingo pasado y aseguró que no se iba a recalificar "ni un solo centímetro cuadrado del monte Abantos".

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