_
_
_
_
_

El sobreseimiento del "caso Bango" reabre la crisis del PP canario

La crisis del PP canario se recrudece. Nada más conocerse el sobreseimiento del caso Julia Bango -el de la abogada agredida cuando investigaba supuestas irregularidades urbanísticas en Tegueste (Tenerife) y en el que numerosos cargos populares se encontraban imputados- se ha reabierto la lucha por el control del partido en las islas. Así, a su actual presidente y alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, José Manuel Soria, le ha salido un competidor en el congreso regional de octubre. El antiguo número dos, Ignacio González Santiago, borrado por la dirección nacional de las listas electorales del 13-J en tanto se aclaraba su posible implicación en las presuntas amenazas y coacciones a la letrada, no descarta presentar su candidatura. González, que ha advertido a sus adversarios que regresa al primer plano político "dispuesto a todo", insistió ayer en que "la juez [Eva Ramírez, del Juzgado de Instrucción número 3 de Santa Cruz de Tenerife] no creyó a Julia Bango, la policía demostró que los imputados [él era uno de ellos] son inocentes y Telefónica certificó que las llamadas telefónicas [amenazantes] no se produjeron". "Tanto Bango como Francisco de la Barreda dejarán de ser militantes del partido, ya que la única salida posible es su expulsión", añadió; "antes deberían tener el valor de decir quien había detrás de ellos, pues estoy convencido de que no estaban solos en esta gran mentira para perjudicar a muchos inocentes y, por descontado, al PP en plena campaña electoral". De la Barreda, ex presidente tinerfeño de los populares y diputado nacional, le replicó de inmediato en el sentido de que el caso Bango aún no ha concluido, ya que su sobreseimiento se halla recurrido. "No cabe tratar de manipular a la opinión pública hablando de un montaje y de autoagresiones, que nadie cree, ya que están sobradamente demostradas en la causa", afirmó De la Barreda, para quien González "miente". Provincias divididas Lo cierto, sin embargo, es que González, para el que "sería deseable" que, en octubre, "hubiese varias candidaturas" a la presidencia del PP canario, está tomando posiciones para intentar desbancar a Soria. El anterior dirigente, José Miguel Bravo de Laguna, incluso le ha potenciado al calificar de "legítimas" sus aspiraciones y, sobre todo, al sugerir a Soria, regidor de Las Palmas, que el próximo presidente sea de Tenerife. Por supuesto, el propio Soria ha saltado como un resorte: "No puede utilizarse como criterio la alternancia de la presidencia entre Tenerife y Gran Canaria. Ese planteamiento no forma parte ni de nuestros estatutos ni de nuestra cultura política". Tampoco han quedado al margen de la polémica los consejeros populares en el Gobierno del archipiélago. Así, el responsable de Política Territorial, Tomás van de Walle, ha expresado su inquietud ante la posibilidad de que se cree "un problema que antes no existía de división entre las dos provincias".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_