Espectacular caída del precio del pollo en las lonjas catalanas

El precio de la carne de pollo en los mercados al por mayor experimentó ayer una espectacular caída de casi el 50%. En la lonja de Bellpuig (Pla d´ Urgell), el precio del kilogramo de pollo amarillo experimentó ayer una caída de 50 pesetas, desde las 95 pesetas por kilogramo a 45 pesetas. La caída del pollo blanco fue algo inferior y su precio quedó fijado en 60 pesetas el kilogramo. El hundimiento de precios se ha debido a la sobresaturación de la oferta, ya que a la mayor producción estacional de cada verano se han sumado las enormes cantidades de pollos que fueron congelados hace unos meses a causa de la crisis de la dioxina estallada en Bélgica. El sector del pollo, formado por centenares de pequeñas explotaciones familiares, puede verse gravemente afectado porque los costes del engorde de pollos -situados entre las 100 y las 110 pesetas por kilogramo- superan muy ampliamente el precio de venta en las lonjas. Las explotaciones familiares venden los pollos engordados en las lonjas -Bellpuig es la plaza de referencia avícola- a través de los grandes mayoristas, como las cooperativas leridanas Copaga y Guisona, y las empresas multinacionales Vall Companys SA y Agrovic.