_
_
_
_
_

Condena de 300.000 pesetas a tres jóvenes por intentar fabricar un explosivo

La sección tercera de la Audiencia Provincial de San Sebastián ha condenado a tres jóvenes de Soraluze (Guipúzcoa) a pagar un total de 300.000 pesetas de multa por un delito de imprudencia temeraria, al considerar probado que en mayo de 1995 se reunieron en un caserío de esa localidad para "fabricar un artefacto explosivo que iban a colocar en una cabina telefónica". El fiscal solicitaba cinco años de prisión. Según la sentencia, uno de los acusados sacó pólvora de varios cohetes pirotécnicos, que terminó explotando, causándole heridas tanto a él como a otro joven ajeno a los hechos enjuiciados.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_