Banderas a media asta

La bandera a media asta ondea ya en la residencia de los Kennedy, en Hyannisport. La familia asume que no hay nada que hacer. "Nos vemos abrumados por el inexplicable dolor y la tristeza ocasionados por la pérdida de John, Carolyn y Lauren", señaló en un comunicado el lunes por la noche el senador Ted Kennedy en nombre del clan. "John era una luz resplandeciente en nuestras vidas y en las vidas de todos aquellos que supieron de él cuando no era más que un niño", añadió el senador, que se ha encargado también de visitar y consolar a Caroline Kennedy, la hermana de John, en su casa de Long Island. En el conjunto de residencias de los Kennedy en Hyannisport sigue la mayor parte de la familia, acompañada de algunos amigos. Un sacerdote oficia misa diariamente.Mientras las dos familias sufren la angustia de que no se encuentren los restos de los desaparecidos, se discute ya dónde deberían ser enterrados. En Arlington, junto a los dos Kennedys asesinados y a Jacqueline, sería una opción: el honor de reposar en el cementerio está reservado a militares muertos en activo, veteranos condecorados, congresistas o magistrados con méritos y presidentes y sus familias. Pero no para los hijos mayores de 21 años, a no ser que intervenga directamente el secretario de Defensa o el presidente Clinton.