Villalobos ofrece suelo a Tabacalera para un gran centro de producción
Después de producir puros durante 70 años, la fábrica de tabaco de Málaga está en peligro de extinción. Es una de las siete factorías que Tabacalera prevé cerrar antes del año 2002 para concentrar la producción de Málaga, Gijón y Santander en una única fábrica en una localidad del Cantábrico aún no especificada. El Ayuntamiento ha reaccionado y ha ofrecido suelo a Tabacalera para que ese gran centro se ubique en Málaga.
"¿Por qué tiene que cerrar el centro malagueño? ¿Por qué ese gran proyecto de concentración industrial no se puede hacer en Málaga?", se pregunta el concejal de Urbanismo, Francisco de la Torre. Para el edil, los 158 puestos de trabajo de la actual fábrica de Málaga bien valen el esfuerzo de buscar "fórmulas" para asegurar la continuidad: "Aspiramos a ese proyecto más amplio", anuncia. El edificio data de 1923, está casi en primera línea de playa, en suelo urbano, aunque de uso industrial, y tiene protección especial. CC OO ha propuesto que sea adquirido por el Ayuntamiento o la Junta para uso cultural o ciudadano y que la factoría se traslade a otra ubicación más adecuada a sus necesidades actuales de producción. De la Torre reconoció que las instalaciones podrían "enriquecer" el equipamiento social y cultural de una de las zonas más masificadas de la capital. La decisión definitiva de Tabacalera se ha aplazado hasta septiembre, mes en el que los sindicatos ya han anunciado movilizaciones. El anuncio de la empresa se produce justamente cuando el inicio del Paseo Marítimo del Poniente es casi una realidad. Estas obras ponen aún más en valor un edificio que está a escasos metros de la única zona virgen de las playas de la capital. CC OO no cree que haya una operación especulativa detrás, sino que se trata de una reestructuración global mientras De la Torre opina que "tal vez el valor del edificio influya, pero no como factor determinante". Para IU, la coincidencia es sospechosa. "No vamos a consentir ningún cambio de uso del suelo. Además, no se puede avanzar en la desertización industrial y desvertebración del tejido productivo de la provincia", se queja su portavoz, Rafael Rodríguez. El responsable de Urbanismo quiso despejar cualquier duda: "El edificio es sólido, así que no es posible su declaración de ruina y tiene protección de primer grado, lo que significa que sólo se puede tocar para su rehabilitación. Sólo se puede mantener o mejorar". El arquitecto Salvador Moreno Peralta ratifica: "No es un patrimonio con el que se pueda especular por su protección".
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