Coca-Cola pierde 16.500 millones de pesetas por las intoxicaciones de junio

Coca-Cola anunció ayer que la retirada de sus productos en Francia y Bélgica, donde 200 personas enfermaron después de beber el refresco, costará 16.500 millones de pesetas, 7.000 millones más que las pérdidas previstas inicialmente. La empresa estadounidense de bebidas ha calculado esta cifra teniendo en cuenta el coste de desechar tanto el producto como los envases. La compañía ya ha devuelto a sus almacenes 17 millones de refrescos, lo que supondrá una caída de un 7% de sus ventas en Europa, el equivalente al 1% de su negocio en el mundo. La multinacional, la mayor empresa de bebidas gaseosas del mundo, indicó que está investigando la posibilidad de que parte de estos gastos los cubran los seguros suscritos.

La venta de cocacolas fue prohibida en junio en Francia y Bélgica, después de que la compañía reconociera que el dióxido de carbono de algunas partidas de refresco habían sido contaminadas por gases sulfurosos en la fábrica belga de Amberes. También admitió que un producto fungicida tóxico había caído sobre la superficie de latas de la planta de Dunquerque (Francia).