Tulipanes a ritmo de jazz

El conjunto holandés Zenker/Kappe 4tet actuó ayer, por segunda vez en 24 horas, en el escenario principal del XXIII Festival Internacional de Jazz de Getxo. Compartir tablas con el cuarteto del trompetista italiano Paolo Fresu era parte de la recompensa por haberse impuesto en el concurso de grupos auspiciado por el certamen vizcaíno especializado en jazz europeo. De esta manera, el conjunto añade un nuevo triunfo a su corto pero fértil historial. "Nos ha sorprendido el premio. No pensábamos tanto en competir como en la oportunidad de tocar. Eso nos dio cierta relajación para hacer un buen concierto; el no tomárnoslo como una pelea, sino como una actuación más". Esto es lo que afirma el trompetista Christian Kappe apuntando posibles claves de su éxito en una muestra, según el guitarrista Florian Zenker, ciertamente enriquecedora para la banda: "Nos ha dado la oportunidad de conocer a colegas y el tipo de música, o los conceptos, de otras partes de Europa. Hay gente joven en el continente que está haciendo un jazz que empieza a tener sus propias señas de identidad. Eso hace que no se tenga que mirar ya al jazz que viene de Estados Unidos como la única cosa que hay que hacer o imitar. En Europa también hay gente que tiene cosas que decir". En cuanto a su propia música, Zenker la define de la siguiente manera: "Mezclamos un montón de elementos. Ponemos mucha atención en que cada tema tenga un colorido distinto o, utilizando un símil gastronómico, una salsa distinta. Es como si estuviésemos en un mercado y cogiéramos diferentes ingredientes. Además, intentamos que el grupo sea bastante democrático. Hay como una especie de diálogo a cuatro voces, no parece que haya un señor destacado en el grupo y que los demás están ahí de comparsas". Así habla el guitarrista de un grupo que tiene previsto realizar sendas giras por Alemania y Holanda, negocia con los responsables del festival de Montreal y ya planea la grabación de su tercer disco de larga duración. Pero, pese a lo apretada que está su agenda, Florian Zenker asegura que, como en España, en Holanda es difícil ganarse la vida como músico de jazz. "Es posible, pero no fácil. Es como estar todo el día haciendo malabarismos. Para sobrevivir tienes que compaginar el jazz con acompañar a un cantante de pop, dar clases, etcétera". Así se ganan el sustento los componentes de un cuarteto que, con su triunfo en Getxo, se ha hecho acreedor a 500.000 pesetas, la grabación de un disco compacto, un trofeo y la participación en los festivales de jazz de Ibiza y de la localidad belga de Hoeilaart. Tal ha sido la superioridad del Zenker/Kappe 4tet, que también ha acaparado los Premios del Público: mejor grupo y mejor solista, concedido éste a su trompetista. Asimismo, el jurado ha otorgado el segundo premio (200.000 pesetas y trofeo) al Alexander Shevtsov"s Trio ruso y ha escogido como mejor solista a su bajista: Anton Revniouk.