El culebrón de Chávez
HUGO CHÁVEZ se está convirtiendo en su propio culebrón, con consecuencias que pueden resultar nefastas. El populista presidente de Venezuela tiene su propio programa-consultorio en la televisión, en el que responde a oyentes que le llaman, y ha lanzado su periódico, El Correo del Presidente. Aunque la ley se lo prohíbe, ha entrado de lleno en la campaña para elegir el 25 de julio una Asamblea Constituyente que supone una novedad en la historia venezolana. Ya cuando juró su cargo, Chávez utilizó la ilegal fórmula de "moribunda" para referirse a la Constitución vigente. Se ha prometido "refundar" Venezuela, y quizá lo consiga. Pero, ¿en qué dirección? Aunque no ha sido aún muy explícito sobre sus planes, parece querer hacer caso omiso de la separación de poderes para concentrarlos todos, o casi todos, en su persona. Chávez tiene un indudable estilo propio, cuartelero, brusco, que presenta con frecuencia rasgos preocupantes. La introducción de la enseñanza militar en las escuelas desde los 8 a los 18 años, con materias sobre armamento o régimen interno castrense, remiten a prácticas del fascismo europeo del periodo de entreguerras. No parece que militarizar la sociedad venezolana desde la escuela sea el mejor remedio para superar el fracaso de la anterior clase política.
Desde su investidura, tras unas elecciones que ganó con amplitud, Chávez ha demostrado poco respeto a las normas y al Parlamento, que no controla y que disolverá si la nueva Constitución se lo permite. Ha situado en puestos clave de la Administración y del sector público a sus amigos y compañeros de armas en la fracasada sublevación de 1992. Ha mantenido, sin embargo, al anterior ministro de Hacienda para proseguir la política de liberalización e intentar sacar a Venezuela de una crisis económica que le ha costado el 5% del PIB y un aumento insoportable de la desigualdad. A juzgar por algunas encuestas, muchos venezolanos confían en la nueva etapa constituyente. Chávez tiene que demostrar que no les defraudará.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
2026, el año en que Iván Cepeda tendrá que derrotar a Trump y al ‘Ubérrimo’
Sánchez pide a los ministros medidas sociales que no dependan del Congreso para recuperar el pulso
Umar Sadiq, el fichaje más caro en la historia de la Real Sociedad que nunca encontró su sitio
Eguberri on, Bon Nadal, Boas Festas
Lo más visto
- Europa entra en estado de alerta ante la embestida estratégica de Trump
- ¿Qué pasa si uno solo de los ganadores del Gordo de Villamanín decide denunciar?
- Los grandes derrotados del Gordo de Navidad de Villamanín, 15 jóvenes de entre 18 y 25 años: “Hoy hemos perdido amigos”
- La larga sombra del hijo único: China paga con una crisis demográfica su mayor experimento social
- El giro del PP con Vox: de prometer no gobernar con la extrema derecha a normalizarlo tras el resultado en Extremadura




























































