La Junta asegura que Astilleros de Sevilla negocia un contrato que garantizará un año de trabajo

La Junta anunció ayer que Astilleros de Sevilla espera firmar un contrato con el grupo naviero italo-suizo Panadriatic para la construcción de dos buques. Esta operación, si se cierra, garantizará un año de actividad y suspenderá parte del expediente de regulación de empleo previsto. Los trabajadores recibieron la noticia durante una asamblea convocada por el comité de empresa. El personal, que lleva varios días de movilizaciones, ocupó las instalaciones de la dirección de Astilleros y abucheó a los responsables de la planta antes de la presentación de una obra.

El presidente del comité de empresa de Astilleros en Sevilla, Ignacio Sánchez, comunicó ayer a los trabajadores, reunidos en asamblea, que en una reunión mantenida a primeras horas de la mañana de ayer con el director general de Industria de la Junta, Francisco Mencía, éste había informado de la llegada inminente de nueva carga de contratación. El anuncio fue recibido con aplausos por los trabajadores, que inmediatamente después cambiaron las palmas por abucheos contra los responsables de Astilleros, que se disponían a presentar una obra realizada en la planta. Ignacio Sánchez atribuyó "a la voluntad política de la Junta de Andalucía" las conversaciones mantenidas con Panadriatic para la construcción de dos transbordadores. Sin embargo, el director de Astilleros en Sevilla, Andrés Sanz, consideró "imprudente" el anuncio porque la operación aún no está cerrada. "Estamos en un periodo muy importante de conversaciones con potenciales clientes que pueden fructificar en un corto espacio de tiempo", subrayó Sanz, quien se negó a confirmar el nombre de la naviera contratante. Sanz advirtió de las consecuencias negativas que la conflictividad laboral de la factoría podría tener para culminar las operaciones comerciales abiertas. "Es evidente; esto está perjudicando de una forma grave en todas las conversaciones", subrayó el directivo. Sanz comentó que, de firmarse el acuerdo, se "minimizarán" los expedientes de regulación de empleo anunciados por la empresa. Según dijo, "sólo unos pocos trabajadores no tendrían trabajo" porque las labores iniciales de los buques, de acuerdo con su explicación, se centrarían en realizar tareas de ingeniería y diseño. La demanda de mano de obra se incrementaría en los meses siguientes. Sanz consideró "adecuada" la plantilla del astillero y llegó a asegurar que lucha para que sus hijas trabajen en la planta. Asimismo, reiteró la apuesta de Astilleros por mantener la factoría de Sevilla que, dijo, cuenta con las mejores perspectivas comerciales.