Yeltsin somete al Senado ruso el envío de tropas a Kosovo

El presidente ruso, Borís Yeltsin, envió ayer un mensaje al Consejo de la Federación, la Cámara alta del Parlamento, para que apruebe el envío a Kosovo del contingente de paz. Según la Constitución rusa, para poder mandar tropas al extranjero es necesario tener el visto bueno del Senado. La Cámara Alta ha decidido reunirse en sesión extraordinaria el próximo viernes para permitir un pronto envío de los soldados rusos que deben unirse a los 200 paracaidistas que hace diez días tomaron por sopresa el control del aeropuerto de Pristina.

La votación pasará sin problemas siempre y cuando el Gobierno deje en claro que correrá él mismo con los gastos de la misión de paz y que no presionará para que sean las regiones las que la financien. Según cálculos de especialistas, la manuntención anual de los 3.600 soldados que servirán en Kosovo puede llegar a costar 500 millones de dólares (75.000 millones de pesetas), suma nada despreciable para el Ministerio de Defensa que no tiene dinero ni siquiera para pagar a tiempo a sus oficiales. Mientras tanto, Rusia ha comenzado las más grandes maniobras militares desde la época soviética, concretamente desde 1985. El general Yuri Baluyevski, vicejefe del Estado Mayor, aseguró que la manobrias estaban previstas desde hace un año y que, por lo tanto, "no son una demostración de músculos".