Velázquez viaja al Alto Aragón

CONCURSOCARMEN MORÁN, Sevilla Gracias a Velázquez, Picasso y Matisse, un grupo de alumnos de 4º de ESO de Trebujena (Cádiz) viajarán a Jaca (Huesca) el próximo 28 de junio. La excursión la han ganado en un concurso nacional en el que han obtenido el primer premio de expresión plástica. Para participar en este certamen convocado por la Fundación de Ayuda contra la Droga y las Consejerías de Asuntos Sociales y de Educación, había que elegir uno de los temas propuestos, ponerse a pensar, y transformarlo en pequeñas obras de arte escolar. Los chicos del instituto gaditano Alventus debatieron durante varias jornadas sobre la relación entre jóvenes, sobre la movida, los problemas de los adolescentes o el medio ambiente. Y luego, se permitieron el lujo de cambiar a su aire, famosos cuadros de más famosos pintores. Así, Los Borrachos de Velázquez, les ha servido para tratar la movida juvenil. Personajes modernos sustituyeron a Baco, y las coronas de laureles del Dios se trocaron en cascos de moto. Donde Velázquez puso una capa, ellos colocaron un radio cassette y donde había un paisaje bucólico apareció una noche urbana. El orden de los motivos velazqueños no se ha tocado, pero la orgía de vino se ha transformado por arte de birli birloque en una movida del sábado noche. Junto a esta nueva obra, colocaron el Velázquez auténtico a tamaño postal y un texto en el que los estudiantes cuentan lo que opinan de la movida y donde ofrecen algunas alternativas a esta forma de diversión. "Lo que querían decir es que los jóvenes se han divertido en todos los tiempos pero ahora se hace de otra forma y con consecuencias distintas", explica la profesora, Ana María Cuevas, en vista de que a los alumnos parece que les ha comido la lengua el gato. ¿Al menos sabrán dónde está Jaca?. "En Aragón", "en Huesca". Eso sí lo saben y lo dicen rápido porque ahí se van a pasar unos días de excursión que también le deben al arte de Picasso. Con el Guernica han abordado el paso de la adolescencia a la madurez y el abandono del hogar paterno. La cabeza del caballo con la boca abierta que dibujara el artista malagueño se ha multiplicado gracias a la fotocopiadora hasta convertirse en un dragón multicéfalo que viene a representar los peligros que, para los padres encuentran en la sociedad a la que se van a enfrentar sus hijos. Al otro lado del cuadro, las figuras enloquecidas de Picasso son los padres llorando por la escapada de sus vástagos. Y en el medio una transición traumática, de adolescentes a mayores, del hogar familiar a la vida propia. Las conclusiones de los chicos es que esa época es dura y angustiosa para todos. La aldea, de Chagall, les ha servido de inspiración para desarrollar la relación que guardan los jóvenes con el medio ambiente: donde el pintor prolongaba la cabeza de un personaje en un sombrero ellos han puesto un pensamiento ecológico y han colocado soles y plantas por doquier sin que se pierda la visión original del cuadro. "En la naturaleza los jóvenes nos sentimos libres y no corremos riesgos", explican al alimón Noelia Luza y Juana María Moreno, dos de las alumnas que han participado. Esas son algunas de las conclusiones que han acompañado este trabajo manual premiado. Pero la profesora quiere destacar que las obras de estos alumnos trascienden la actividad propia de una clase de manualidades, "porque los alumnos han pasado mucho tiempo en tutorías reflexionando sobre estos temas". Así pues, no es sólo una expresión plástica sino el desarrollo de un debate en el que todos han aportado ideas sobre la vida que les rodea a los 15, 16 ó 17 años que tienen ahora. El cuarto cuadro premiado es una versión trebujenera de La Danza de Matisse. José Antonio Pruaño, Juan Rozado y Laura Pazo son algunos de los artistas que han cambiado la desnudez de los personajes del francés por ropas de las distintas tribus urbanas. Las figuras que danzan cogidas de las manos son jóvenes de todos los gustos y colores: "Este es el punki, y este el hippy, aquel es el rasta y ese de los pantalones más gansos es el rapero", va señalando José Antonio en la fotografía. ¿Y esto qué significa? "Pues que todo el mundo es igual, sin que importe el grupo social al que pertenece y que podemos hacer cosas juntos", dicen convencidos los alumnos. Amistad, confianza y ayuda son algunas de las palabras que el jurado ha podido leer entre las conclusiones que aparecen en este trabajo. Y todo habrá ayudado a que estos chicos se lleven el primer premio nacional y una excursión a Jaca. Buen viaje.