Larrañaga tuvo relación directa con tres de las cuatro personas asesinadas en Vitoria
Juan Luis Larrañaga, el asesino confeso de la abogada de Vitoria Begoña Rubio y del empresario de máquinas tragaperras Agustín Ruiz, conocía personalmente a las otras dos víctimas de cuyas muertes no se ha declarado autor. El detenido mantenía una relación de cierta amistad con la profesora de inglés Esther Areitio y de vez en cuando comía con el cordelero Acacio Presa en un céntrico restaurante. Estos dos asesinatos siguen bajo investigación policial. A la profesora de inglés Esther Areitio, que fue hallada descuartizada en mayo de 1998 dentro de seis bolsas de basura, y a Larrañaga se les veía juntos, de vez en cuando, en un bar del barrio vitoriano de Aranbizkarra. Según coincidieron ayer un taxista y dos vecinos de dicho barrio, y fue confirmado por la policía, Larrañaga y Areitio solían tomar alguna copa en el Bar Androide, situado en la plaza junto a la que el detenido vivió con su mujer y su hijo. El local está situado bajo la vivienda de la fallecida profesora. La policía, sin embargo, no quiso dar más detalles sobre esa relación. La profesora abrió la puerta a su asesino, ya que no estaba forzada, y en el domicilio se encontraron unos guantes de látex. También se encontraron restos de guantes de látex en el despacho de la abogada supuestamente asesinada por Larrañaga. La Ertzaintza ha puesto un número de teléfono a disposición de los ciudadanos para que aporten información sobre esos casos. PASA A LA PÁGINA 6
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