Recepciones

DE PASADACon las vacaciones escolares y la llegada masiva de público, el pasado miércoles empezó la feria de Córdoba; cinco días después de su inauguración. Las jornadas anteriores sirvieron de ensayo. El lunes y el martes el Arenal fue coto privado de jóvenes incombustibles y de políticos en busca del voto. Recepciones y más recepciones a los medios de comunicación. Colectivos, sindicatos, agrupaciones y partidos políticos abrieron sus puertas a los periodistas. Rosa Aguilar ofició de anfitriona en su caseta en la noche del lunes. Los organizadores del acto tuvieron problemas -acaso incluso debate ideológico- con un grupo de pequeñines vendedores ambulantes que se acoplaron junto a la mesa y participaron del ágape. En un principio, lo hacían veladamente. Con disimulo cojo una patata, luego un pinchito... Poco a poco fueron encontrándose bien y acabaron perfectamente integrados entre los invitados. Al parecer, alguno de los dirigentes de IU no estaba muy conforme con la presencia de los chavales, pero a ver quién era el guapo que los echaba con todos los medios delante. Para terminar, bebida caribeña en el Rincón Cubano bajo la mirada del héroe para unos, villano para otros, Fidel Castro. Quienes no tuvieron problema con los vendedores de flores fueron los dirigentes populares. La presencia del alcalde, Rafael Merino, en la recepción de su partido propiciaba que una pareja de municipales aguardara en la puerta. Por si acaso, los chavalitos no se acercaron. Dentro, plantel completo del Partido Popular de Córdoba: el secretario regional, Juan Ojeda; el presidente provincial, Liborio Cabello; el parlamentario autonómico Salvador Fuentes; la hermana de y candidata a la presidencia de la Diputación, María Jesús Botella; y la casi totalidad de miembros de la lista que el PP presenta al Ayuntamiento de la ciudad. Para terminar, y tomando el testigo que los populares habían soltado al mediodía, el PSOE organizó su sarao en la noche del martes. Quizá fue éste el más deslucido, ya que el candidato, José Mellado, no pudo asistir por motivos familiares más que justificados. Y porque los invitados eran siempre los mismos y el cuerpo tiene un límite. Quienes no se perdieron el acto fueron el representante de la Junta en Córdoba, Luis Hidalgo; el delegado de Economía, Antonio Hurtado; el de Trabajo, Antonio Poyato; y el de Asuntos Sociales, Manuel Sánchez Jurado. ANTONIO FERNÁNDEZ