Varios expertos desmenuzan para Monteseirín la Sevilla ideal

El candidato socialista a la alcaldía sevillana, Alfredo Sánchez Monteseirín, asistió ayer a la clausura del foro Ágora Sevilla 2000, un instrumento con el que el PSOE ha intentado elaborar un esquema de la ciudad ideal, de los caminos por donde se quiere que crezca y avance la capital andaluza. En el citado foro participaron varias decenas de personas repartidas en ocho grupos de debate, todos ellos coordinados por el secretario de Estudios y Programas de la Ejecutiva Provincial del PSOE de Sevilla, Luis Ángel Hierro. El foro Sevilla, ciudad del empleo estuvo coordinado por el profesor de Economía Española en la Universidad de Sevilla, Bartolomé Pérez Ramírez y se apostó por una mayor actuación del Ayuntamiento a la hora de fomentar la creación de empleo (el programa de Sánchez Monteseirín propone destinar el 10% del presupuesto municipal a este aspecto), dándole facilidades a los empresarios comprometidos con la creación de puestos de trabajo, priorizando la formación de los trabajadores y aconseja apostar de manera clara por el turismo como fuente de riqueza de la ciudad. Policía Local En el grupo de trabajo titulado Sevilla, ejemplo de seguridad y libertad, encabezado por el ex delegado del Gobierno en Andalucía Alfonso Garrido Ávila, se pide que la Policía Local se ciña a su papel en los barrios y deje de ejercer algunas de las competencias que, a juicio de los integrantes del foro, correponderían al Cuerpo Nacional de Policía. Además, este nuevo concepto de la Policía Local contempla la descentralización y un mayor peso de los distritos (una constante en los ocho foros), así como un diálogo fluido y regular con los ciudadanos. El grupo coordinado por el director de la Escuela Superior Técnica de Arquitectura, Félix Escrig, recomienda que se cultive más el asociacionismo estructural entre la población y un mayor cuidado a la hora de dibujar el desarrollo de los barrios, en vez de concentrarse tanto en el casco histórico: "Que cada barrio tenga al menos el mismo equipamiento que cualquier pueblo de la misma dimensión". Se aconseja imponer un impuesto a las casas deshabitadas y propulsar la imagen de la ciudad usando algún elemento simbólico. Para mejorar la habitabilidad se proponen restricciones al tráfico de vehículos particulares en las horas y lugares de mayor saturación. En los foros sobre bienestar, cultura, deporte, barrios e instituciones, se aboga por una ciudad más equilibrada entre centro y periferia, y con programas de cara a la población, más que buscando notoriedad de manera elitista.