34 grupos de Bilbao La Vieja se quejan de la desidia municipal

Un total de 34 grupos sociales de los barrios de Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala, las zonas más degradadas de la capital vizcaína, responsabilizaron ayer al Ayuntamiento de desidia en la elaboración de un plan de rehabilitación, al cumplirse cuatro años de la formación de la mesa conjunta formada por vecinos y partidos políticos para abordar la regeneración de esta zona. En una rueda de prensa celebrada en la calle, frente al edificio consistorial, los vecinos dijeron que el Ayuntamiento "no ha demostrado la voluntad política suficiente, ni ha aportado los recursos técnicos y económicos necesarios para impulsar y liderar un plan de rehabilitación integral". En esta zona viven cerca de 18.000 personas y el desempleo alcanza al 30%. Apenas hay comercio y los narcotraficantes se asoman en cualquier esquina. Los representantes de los 34 colectivos, desde asociaciones vecinales, comunidades religiosas, hasta grupos sociales y culturales, valoraron positivamente la creación e impulso de la Mesa de Rehabilitación, el órgano compuesto por las asociaciones y partidos políticos para recuperar la zona, y la existencia de algunos proyectos proyectos urbanísticos y sociales. Pero constataron la "falta de compromiso" municipal en contraste con otras zonas como la de Abandoibarra, donde las actuaciones urbanísticas empezarán este verano. "El desarrollo de una ciudad no se mide sólo por atraer turismo internacional ni construir grandes infraestructuras, sino por la mejora de la calidad de vida de todas las personas que la habitan". Falta de liderazgo del alcalde A su juicio las principales deficiencias son la falta de liderazgo "del alcalde y el equipo de gobierno" para planificar actuaciones ante otras instituciones, las "reiteradas suspensiones de las comisiones de trabajo y de la propia Mesa", las ausencias "constantes de algunos representantes políticos en las reuniones" y la descoordinación entre las áreas del Ayuntamiento. "Reclamamos que el Ayuntamiento se comprometa a impulsar eficazmente la Mesa por la Rehabilitación como un instrumento necesario de implicación política y de participación ciudadana". Los 34 grupos detallaron una veintena de propuestas y proyectos que no se han llevado a la práctica, como programas de ayuda al comercio, la entrega de viviendas terminadas hace dos años, centros para colectivos desfavorecidos o el plan de formación y empleo. "Es difícil pensar en planes más ambiciosos, a medio y largo plazo, si el Ayuntamiento no es capaz de poner en marcha estos pequeños proyectos. Por ello solicitamos que, a través de la Mesa por la Rehabilitación, dé salida con la máxima urgencia a todas estas iniciativas paralizadas en los últimos meses". El consistorio tiene un plan para que en plazo de cuatro años se derriben 468 casas y se construyan un total de 4.000 viviendas, así como zonas verdes.