Los rectores valencianos logran aplazar la entrada de la nueva selectividad

Los rectores valencianos, de acuerdo con las directrices que la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE) exigió al Ministerio de Educación, lograron ayer aplazar la entrada en vigor de la nueva selectividad hasta el curso 2000-2001. El acuerdo -tras una reunión de los vicerrectores de Estudio de las cinco universidades públicas valencianas con la directora general de Universidades, Carmen Martorell- supone el mantenimiento de la vieja selectividad para las próximas pruebas de acceso a la universidad, que se realizarán, como todos los años, en junio próximo. Los equipos rectorales sí están obligados, sin embargo, a acorgerse a la disposición final del real decreto recién aprobado, por el que los estudiantes que deseen subir nota podrán presentarse cuantas veces deseen a partir de septiembre. Esta fórmula corresponde a una especie de cláusula introducida a última hora por los rectores españoles en el decreto, que aprobó el Consejo de de Ministros el 30 de abril, después de que el Ministerio de Educación mantuviera intensos contactos telefónicos con la CRUE, que se encontraba reunida precisamente en Valencia, con motivo de la conmemoración de los Cinc Segles de la Universidad de Valencia. Fue el presidente de la CRUE, Saturnino de la Plaza, quien adelantó ese mismo día que el nuevo decreto tendría una disposición que permitiría a aquellas universidades y comunidades autónomas que entiendan que no hay tiempo para poner en marcha la nueva selectividad, posponerla hasta el siguiente curso 2000-2001. El presidente de la CRUE también adelantó que sería de obligado cumplimiento la entrada en vigor de la nueva fórmula de repetir examen cuantas veces lo requiera el alumno para aumentar la nota y poder acceder a la nota de corte que le exige la carrera que pretende hacer. Lo que se pospone, precisó De la Plaza, son los capítulos del decreto relativos a los cupos específicos (número de plazas disponibles para extranjeros, minúsválidos, deportistas de élite) y aquellos puntos referidos a la posibilidad de distritos interactivos entre varias comunidades autónomas. En la Comunidad Valenciana más de 45.000 alumnos de COU se presentaron en junio pasado a las pruebas de acceso a la universidad, siguiendo el viejo modelo, que es el que se mantiene un curso más. La polémica se repitió una vez más ante el rechazo que provocan estas pruebas, primero entre el alumnado, y en segundo lugar entre el propio profesorado y equipos rectorales de las universidades. Las posturas más progresistas en la universidad consideran que la selectividad no resuelve el problema del fracaso escolar, una vez se ha accedido al sistema universitario. De hecho, según un amplio estudio realizado en la Comunidad Valenciana, aquellos alumnos que aprueban la selectivad con una nota media de entre 5 y 6, engrosan los porcentajes de quienes no terminan sus estudios universitarios.