Alcaldes del PP desoyen a su partido y llaman a la manifestación por el Segura en Madrid
Regidores del PP en La Vega Baja no son ajenos al movimiento ciudadano que clama por el saneamiento del río Segura. Desoyendo a su partido, alcaldes como los de Formentera del Segura y Redován han dictado bandos animando a los ciudadanos a que se manifiesten mañana por las calles de Madrid. La mayoría de ayuntamientos de la comarca gobernados por el PP han dispuesto autobuses gratuitos para procurar un desplazamiento masivo. Empapelada con propaganda de la movilización, La Vega Baja realizará mañana su mayor protesta fuera de sus fronteras.
Ni el mundo del deporte ha permanecido ajeno a la protesta. El partido de fútbol que el equipo de Orihuela, líder en la clasificación de su categoría, debía jugar mañana, se ha adelantado a hoy para que los aficionados puedan asistir a la protesta. El programa de fiestas de la pedanía oriolana de Desamparados tiene el domingo un solo acto: "Manifestación", y hasta la Iglesia se ha movilizado. El consejo interparroquial lleva semanas instando a los ciudadanos, en un comunicado que se lee en todas las iglesias, a que participen en los actos que de acuerdo con su conciencia crean conveniente "ante la problemática" que sufren "todos los habitantes de ambas márgenes del Segura, y ante la contaminación del río, hecho que constituye una degradación ecológica y posible riesgo para la salud humana". Más de 100 autobuses partirán la madrugada del domingo desde toda la comarca hacia la capital de España. A las once y media de la mañana de la jornada festiva arrancará la protesta de la estación de Atocha, discurrirá por las calles de Jacinto Benavente, Carretas, Puerta del Sol y Carrera de San Jerónimo y desembocará frente al Congreso de los Diputados. La movilización está coordinada por la Comisión Pro-Río de Orihuela, Cauce Arriba de Formentera, Almoradí, Rojales y Guardamar, Segura Vivo de Guardamar y Segura Limpio de Rojales y Almoradí. El portavoz de Pro-Río, José Antonio Muñoz Grau, explica que los ciudadanos de la comarca están hartos de que el Segura sea una cloaca, pues "es utilizado de vertedero urbano e industrial, sobre todo en la Comunidad de Murcia". De los 314 kilómetros de longitud que tiene el río, sólo 40 kilómetros de su cuenca baja pertenecen a la Comunidad Valenciana. "Lo que queremos son soluciones urgentes, y no parches que sólo sirven para acallar las protestas pero que no arreglan la situación", añade. Muñoz Grau respondió ayer a las críticas del alcalde de Orihuela, José Manuel Medina, a la Comisión-Pro-Río, a cuyos miembros tachó de "sicarios del PSOE". "No representamos a ningún partido ni somos políticos, aunque a alguno que no le gusta esta gran movilización se dedique a insultarnos y a desprestigiarnos", dijo. Medina no ha confirmado su participación en la manifestación. Su asistencia dependerá, según dijo, "de lo que se vaya a decir y hacer en Madrid". Asociaciones vecinales y culturales de casi todos los pueblos de la comarca, grupos ecologistas, sindicatos, los juzgados de aguas de Orihuela y Callosa de Segura, sindicatos de regantes de Catral y Fomentera y otros colectivos ciudadanos se han adherido a la manifestación. No es la de Madrid la primera protesta por la contaminación del río. Con respuesta multitudinaria se han celebrado manifestaciones en el último año en Orihuela, Murcia y Valencia. Ecologistas de toda España han anunciado también que viajarán a la capital para apoyar la protesta. Desde Elche partirán dos autobuses, sufragados por su Ayuntamiento. Con una población de 250.000 habitantes, el río es el eje de esta comarca eminentemente agrícola. Las aguas del Segura llegan a los campos de cultivo de la comarca a través de un enorme entramado de acequias, azarbes y canales que los árabes construyeron hace ocho siglos. Por esa tela de araña discurre hoy agua sucia y contaminada. Algunas cosechas regadas con aguas de la acequia Puerta de Murcia se perdieron a consecuencia de los vertidos tóxicos de una fábrica de Molina del Segura. El síndico de esa acequia, Antonio Zapata, recuerda que la Consejería de Agricultura no ayudó a los agricultores que perdieron sus cosechas. "Ni Murcia nos apoyó ni Valencia nos ayudó", denuncia Zapata.
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