Las críticas a la OTAN presiden la festividad en casi toda Europa

Las peticiones a favor de la paz en el conflicto de Yugoslavia presidieron ayer el Primero de Mayo en casi todo el mundo. Millones de manifestantes, en miles de actos convocados en los cinco continentes, pidieron que acabe la guerra y mejoras para los trabajadores en un ambiente pacífico, sólo roto por incidentes, con varios heridos, en Berlín y Turín. Rusia fue uno de los países donde la fiesta tuvo mayor carácter político, ya que, junto a las condenas a la OTAN, se unieron las exigencias para que dimita Borís Yeltsin.

El líder comunista ruso Guennadi Ziugánov, ante decenas de miles de manifestantes en Moscú, acusó al presidente Yeltsin de ser el "principal culpable" de la guerra en los Balcanes. El alcalde de la ciudad, Yuri Luzhkov, denunció en otro acto "el genocidio de la OTAN contra el pueblo yugoslavo", al tiempo que evocaba los riesgos de una "guerra global".En Berlín, se registraron numerosos heridos, en su mayoría levemente, durante los enfrentamientos que se produjeron entre los manifestantes del Primero de Mayo Revolucionario y la policía. También en Turín, la manifestación se saldó con unos10 agentes heridos, debido a los incidentes registrados entre la policía y un centenar de jóvenes de tendencia anarquista. Posteriormente, un grupo de radicales lanzó varios cócteles mólotov contra la sede del sindicato CGIL.

En Zúrich se registraron enfrentamientos en una concentración a favor de la solidaridad internacional que reunió a unas 15.000 personas. En Varsovia, los manifestantes fueron atacados por militantes de derecha, a los que respondieron lanzándoles flores.

En Francia, centenares de miles de manifestantes desfilaron por las principales ciudades del país sin que se registraran incidentes. Lo mismo sucedió en otros países europeos. En Portugal, miles de personas se concentraron en Oporto para protestar contra los conflictos bélicos en los Balcanes, Angola y Timor Oriental. En Holanda, unas 1.000 personas apoyaron la querella presentada por Belgrado ante el Tribunal de La Haya acusando a la OTAN de genocida. Otros actos en contra de esta organización militar se desarrollaron en Estocolmo, Praga, Sofía, Budapest, Atenas y Ankara.

También en América Latina los actos estuvieron presididos por el repudio a la guerra de los Balcanes, así como a la protesta por las consecuencias de la crisis económica. En Sao Paulo se concentraron más de 150.000 personas y en La Habana, más de un millón de personas desfilaron por la plaza de la Revolución, según cálculos de los organizadores. Fue una de las mayores marchas del Primero de Mayo de los últimos años. El desfile, dedicado este año a celebrar el 40º aniversario de la revolución, estuvo encabezado por Fidel Castro.

En Asia, por el contrario, los lemas de las manifestaciones se centraban en el problema del paro. Así ocurrió en Pekín, Tokio, Seúl o Phnom Pehn. En Nazaret (Israel), más de 10.000 manifestantes de la coalición comunista Hadash, que engloba a árabes y judíos, gritaron consignas a favor del proceso de paz y en contra de la política de Benjamín Netanyahu.