El reverendo Jesse Jackson intenta negociar en Belgrado
La Casa Blanca intentaba convencer ayer al reverendo Jesse Jackson para que no viaje a Belgrado, como era su intención. Jackson, al frente de una delegación de líderes religiosos norteamericanos de todas las confesiones, tenía previsto discutir con Milosevic la liberación de los tres prisioneros norteamericanos y, en general, una salida pacífica al conflicto.
Mike Hammer, portavoz del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca, informó de que los obstáculos oficiales al viaje obedecen a razones de seguridad. "No podemos garantizar que el avión llegue sin problemas a Belgrado en plena campaña de bombardeos", dijo. Jackson respondió que si no podía usar un avión iría por tierra.
La Casa Blanca teme que Milosevic utilice la visita como "un instrumento de propaganda". "Si el reverendo se entrevista con Milosevic deberá reiterarle con toda rotundidad las condiciones de la OTAN". Jackson replicó: "Intentaremos apelar al sentido común de Milosevic para que apruebe una solución diplomática. Será una misión humanitaria con legitimidad moral. Quizá una tercera vía pueda darle la opción de volver a la mesa de negociaciones con dignidad".
Jackson, que es demócrata como Clinton y fue su consejero espiritual durante el caso Lewinsky, consiguió en 1984, en Siria, la liberación de un teniente norteamericano cuyo aparato había sido abatido en la guerra de Líbano. Ese mismo año logró que Castro excarcelara a 48 presos políticos norteamericanos y cubanos. Y, en 1990, desempeñó un papel importante en la liberación de más de 700 mujeres y niños extranjeros retenidos por Irak como escudos humanos frente a un posible ataque estadounidense.
Vladislav Jovanovic, representante de Yugoslavia en la ONU, informó el lunes a Jackson de que su delegación sería bienvenida en Belgrado y podría entrevistarse con los tres soldados norteamericanos capturados el pasado 31 de marzo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.