El programa del PP apenas retoca el sistema de financiación autonómica

El PP apenas retoca, en el programa marco municipal y autonómico para los próximos cuatro años, presentado ayer por la dirección nacional a sus munícipes y parlamentarios, el actual modelo autonómico de España. Tampoco reforma el sistema de financiación vigente hasta el 2001, que los nacionalistas catalanes pretenden modificar sustancialmente para el siguiente quinquenio. El PP da por cerrado en su programa el proceso de transferencias de competencias a las autonomías y abre una vía para trasladar funciones que ahora acaparan esas administraciones a los ayuntamientos.

Los responsables del PP están muy preocupados porque en este momento puedan salir voces desde dentro del partido que proclamen posturas distintas sobre su concepto de España. Quieren demostrarle al PSOE que son el único partido nacional "coherente" y con las mismas ideas en cualquier punto del territorio. La palabra coherencia la repitieron ayer hasta el hartazgo los máximos dirigentes del PP en la presentación del programa marco municipal y autonómico ante la Intermunicipal e Interparlamentaria del partido reunida en la sede nacional de Madrid.Esa uniformidad de mensajes la ensalzó primero la coordinadora de Formación del PP, Mercedes de la Merced; luego el vicesecretario general Mariano Rajoy, responsable de coordinar los trabajos preparatorios de esos programas; y, finalmente, el propio secretario general, Javier Arenas.

Rajoy, ministro de Educación y Cultura, se detuvo mucho en exponer los criterios que el programa fija para el futuro diseño de España. Rajoy sostiene hace tiempo que el actual modelo autonómico concita un alto grado de estabilidad y ha funcionado bien. Por tanto, y tras reformar 11 estatutos autonómicos en la presente legislatura, el PP mantiene que en el futuro no hará falta discutir muchos más traspasos competenciales. Tras apuntar que entre lo que queda de ejercicio y la siguiente legislatura se completará la delegación de competencias sobre provisión de medios para la Justicia, las políticas activas de empleo del Inem, la asistencia sanitaria de la Seguridad Social y la educación no universitaria, Rajoy auguró que en los próximos años no harán falta más traspasos y "España se convertirá en el país del mundo con un nivel de descentralización del gasto mayor". El ministro situó ese gasto autonómico en España en el 35% frente al 25% de los länder alemanes.

Sobre el sistema de financiación autonómica, que debe renovarse en el 2001, Rajoy apostó por insistir sin cambios espectaculares sobre el actual. En todo caso, abogó por implicar más, en apartados de corresponsabilidad y solidaridad, a las autonomías. Y que éstas acuerden nuevas cesiones hacia los municipios, que sólo manejan el 13% del dinero público.

El propio manifiesto presentado ayer, que será ratificado por la Ejecutiva la semana que viene, sintetiza los aspectos fundamentales del nuevo modelo aún por negociar. Como por ejemplo, "que la cesión de tributos ha de ponderarse en función del objetivo de autonomía financiera que se acuerde"; que "la suficiencia financiera, derivada de las distintas capacidades fiscales de las autonomías, debe asegurarse mediante transferencias de nivelación que respondan a objetivos explícitos de solidaridad", y que "la imposición autonómica debe constituirse en la fuente principal de recursos, quedando las transferencias estatales principalmente ligadas a objetivos de nivelación".

En el programa, el PP apunta que con el actual sistema la solidaridad quedaba bastante implícita. Para el futuro propugna explicitarla en aspectos territoriales y personales.