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LENGUA

"Xiquets" en campaña lingüística. Los organizadores de la Trobada denuncian que la Generalitat les "ignora" y "maltrata el valenciano"

Mientras modelaban arañas reciclables con botellas de plástico, aplaudían el desfile de nanos i gegants o completaban un rompecabezas con la imagen del poeta Vicent Andrés Estellés, muchos niños eran conscientes ayer de que no habían ido a Burjassot, a la XII Trobada d"Escoles en Valencià de L"Horta Nord, sólo para pasar un domingo divertido. "Hemos venido para pedir que los profesores, la televisión y los políticos hablen más en valenciano", razonaba Lluís, de 10 años. "Me gustaría", comentaba Carme, de 11 años, "que hubiera más canciones y libros en valenciano". Empar, de 12, ansía que cuando su madre la lleva a Valencia de compras los dependientes no les miren "como bichos raros" por hablar en valenciano. Ante la multitudinaria afluencia de público que desborda las calles de cualquier municipio, los organizadores dividieron este año en dos la trobada metropolitana: una en L"Horta Nord y otra en L"Horta Sud. Pero las previsiones volvieron a quedarse cortas. A lo largo de 250 metros de la avenida de María Ros de Burjassot se apretujaban ayer 20.000 personas (14.000 escolares de 87 colegios y 6.000 adultos), según la Policía Local. Tanta gente como en la trobada del año pasado en Torrent con participantes de las dos comarcas. El acto lúdico y reivindicativo de Burjassot, celebrado bajo el lema De festa per la llengua, dio el pistoletazo de salida a las trobades: a lo largo de la primavera las escuelas en valenciano celebrarán otros 13 encuentros en otras tantas comarcas de la geografía valenciana. El presidente de la Coordinadora d"Escoles en Valencià de la comarca, Josep Vicent Garcia, se congratulaba ayer de la masiva presencia de alumnos, padres y profesores que han consolidado las trobades como "uno de los actos cívicos más multitudinarios" que se celebran en las comarcas valencianas. Tras varias ediciones lluviosas ayer lució el sol y los organizadores se felicitaron por el final del "maleficio meteorológico" que castigaba a las trobades. "Parecía", bromeaba Joan, de 12 años, "que el sol hablaba en castellano".Aunque en la avenida de María Ros no cabía ni un alma, los organizadores de la trobada notaron, como en años anteriores, una ausencia destacada: no acudió ni el consejero de Educación ni ningún representante del Gobierno valenciano. "Ni siquiera han enviado un equipo de Canal 9", ironizaban. El presidente de la Federació Escola en Valencià, Vicent Romans, denunció que la Generalitat "ignora y silencia" un encuentro festivo, de los más multitudinarios de la Comunidad, y que se celebra sin ningún tipo de enfrentamientos ni conflictos. Romans acusa al PP de haber "maltratado" la lengua autóctona a lo largo de sus cuatro años de mandato en la Generalitat. Recita en una letanía todos los agravios del Consell con el valenciano: los libreros reciben menos ayudas que en otras autonomías por editar obras en la lengua propia, parte del profesorado no está capacitado para impartir clases en valenciano y esta lengua se usa muy poco en la Administración y en Canal 9. "El Estatuto de Autonomía contempla una especial protección para el valenciano que este Gobierno ha incumplido tanto en materia de presupuestos, como en actitudes e iniciativas", protesta Romans. Garcia se lamentaba ayer de que el uso de la lengua autóctona no se haya extendido entre los escolares como regula la Llei d"Us i Ensenyament del Valencià: "Sólo el 6% de los alumnos de secundaria y el 17% de primaria dominan el valenciano". A sus espaldas, los escolares habían escrito versos de Estellés: "Assumiràs la veu d"un poble / i serà la veu del teu poble / i seràs per a sempre poble".

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