Blanch tensa más la cuerda en Badalona y arremete contra el portavoz socialista

La tensión en el Ayuntamiento de Badalona alcanza cada día un grado más. Ayer se rozó el surrealismo cuando el alcalde, el socialista Joan Blanch, abrió una conferencia de prensa para presentar la propuesta inicial del presupuesto municipal para 1999 acusando al portavoz de su grupo, Eduard Tortajada, de ser "un hombre de reconocida falsedad". La candidata socialista a la alcaldía -cargo al que todavía aspira Blanch-, Maite Arqué, y el propio Tortajada abandonaron inmediatamente la conferencia de prensa. La alcaldable del PSC rehusó pronunciarse sobre la cada vez más probable escisión en su partido, que estaría encabezada por Blanch: "No me interesa", fue todo lo dijo. Hace días que Blanch aprovecha cualquier acto público con presencia de periodistas para descalificar abiertamente, y cada vez con más dureza, a quienes él denomina "la nueva mayoría que controla el PSC" de la ciudad. Esta mayoría no es otra que la que encabeza la alcaldable, Maite Arqué, y en la que se encuentran buena parte de los concejales del grupo municipal socialista y las direcciones local y comarcal del PSC. Este sector, por otra parte, está respaldado por la dirección del partido, con Narcís Serra al frente. Los socialistas que apoyan al alcalde frente al aparato del partido pretenden que el PSC repita el proceso de primarias, a las que su líder no se presentó. La dirección socialista ha rechazado reiteradamente esta posibilidad y, ante la negativa, los partidarios de Blanch están promoviendo una lista electoral alternativa que pretenden que Blanch encabece. En este grupo de fieles al alcalde se encuentra el concejal de Cooperación y Solidaridad, Pedro Muñoz, a quien el partido ha suspendido ya cautelarmente de militancia, entre otros. Descalificaciones Blanch ha descalificado abiertamente tanto a la candidata de su partido, Maite Arqué -elegida en elecciones primarias por el 80% de la militancia socialista local-, como a la dirección catalana del PSC, en especial a José Montilla y Narcís Serra, pero sigue afirmando que su objetivo es negociar con el PSC. El alcalde de Badalona insistió ayer de nuevo en su idea de que "las primarias de Badalona estuvieron falseadas por la introducción de afiliación irregular, situación que toleró la dirección nacional". Y añadió que él no se dio cuenta de la supuesta manipulación de las primarias hasta el mismo día de su celebración y que por eso fue a votar. El alcalde reiteró una vez más las acusaciones contra la dirección catalana de su formación. "El partido ha intentado destruirme políticamente, lo que supone una intromisión inadmisible en la política de Badalona", aseguró. Blanch insinuó, no obstante, que siente que está perdiendo su batalla y aseguró que está asustado porque, según dijo, ha recibido amenazas de personalidades destacadas cuyos nombres, dijo, hará públicos "cuando sea el momento". Pese a que ya hace meses que se acrecienta el enfrentamiento entre Blanch y el partido, el PSC no se ha atrevido a llevar adelante una moción de censura para apartar a Blanch de la alcaldía y más de un cargo confiesa ahora entre pasillos que la situación se les escapa de las manos. Ahora ya no hay tiempo antes de las municipales; sin embargo, Blanch sí tiene en sus manos hacer cesar a cualquier concejal, posibilidad que nadie descarta en el PSC.