Primera condena a fabricantes de armas de EEUU por las víctimas de tiroteos
El tribunal responsabiliza a 15 empresas de favorecer el tráfico ilegal de pistolas y rifles"Marketing"
Los fabricantes de armas de fuego en Estados Unidos podrán ser declarados responsables legales en casos de violencia o muerte por el uso de las pistolas y rifles que ponen en el mercado. El histórico precedente quedó establecido por primera vez el jueves en un tribunal federal en Brooklyn (Nueva York), que emitió un complejo veredicto debido a la cantidad de partes implicadas. Los familiares de siete víctimas de tiroteos habían demandado a 25 empresas de armas. El jurado determinó que 15 de ellas eran culpables de negligencia en sus operaciones comerciales.
Nueve de esas 15 empresas resultan ser también responsables, en distinto grado, de tres incidentes ocurridos en la zona de Nueva York recientemente. De esos tres tiroteos, sólo en uno hubo un superviviente, Stephen Fox, y sólo a él se le ha asignado una indemnización de 4 millones de dólares (588 millones de pesetas). Fox, que ahora tiene 19 años, era uno de los demandantes. En 1995, un amigo le descerrajó sin querer un tiro en la cabeza, y aunque de milagro no lo mató, la bala sigue alojada dentro de su cráneo. El juicio no era sobre mecanismos de seguridad defectuosos, un argumento que hasta ahora no ha prosperado casi nunca. A cambio, los abogados construyeron durante un mes su acusación sobre el indicio de que los fabricantes no controlan bien sus canales de distribución y, por ejemplo, suministran armas a tiendas que las venden sin pedir licencia o a residentes de otros estados.Entre las nueve empresas que han sido declaradas negligentes y además responsables colaterales (por "causa próxima") de episodios de violencia armada en Nueva York están Beretta USA, Colt"s Manufacturing, Glock y Sigarms. Otras, como Calico, Freedom e International Armament, están entre las que son negligentes pero no responsables.
En el Estado de Nueva York, la venta de armas está sometida a un estricto control y es difícil obtener una pistola o rifle sin los permisos correspondientes. Lo que se ha demostrado en el juicio de Brooklyn es que las mencionadas empresas suministran una excesiva cantidad de armas a otros estados de normativa más laxa (sobre todo en el sur del país), contando con que así cubren la demanda del propio Estado y también la de compradores adicionales que viajan desde Nueva York. Llevar armas de un Estado a otro por este método es ilegal: la abogada principal de los demandantes, Elisa Barnes, comparó este tráfico con "un río de desechos tóxicos" que las empresas no están interesadas en frenar. Casi todas las veces que hay un crimen, tiroteo o redada en Nueva York, la policía anuncia que las armas implicadas vienen de fuera. De hecho, un experto testificó en el juicio que el 90% de las armas usadas recientemente en delitos en Nueva York procedían de otros estados, como Florida, Georgia y Virginia.
Los abogados de los fabricantes de armas alegan que tan sólo concentran legítimamente su marketing en zonas donde hay más demanda y donde pervive la tradición americana de llevar rifles en la camioneta o pistolas en el sobaco.El veredicto se produjo sólo un día después de que un jurado en San Francisco condenara a Philip Morris, la empresa fabricante de Marlboro, a pagar 50 millones de dólares a una fumadora con cáncer irreversible.
En el caso de las empresas de armas, la indemnización monetaria no es lo importante, pero los paralelismos son muchos. No es casual que el FBI controle ambos negocios bajo una misma oficina, la de Alcohol, Tabaco y Armas (ATF, en sus siglas en inglés).
Las armas en manos de los ciudadanos estadounidenses se elevan a la escalofriante cifra de 200 millones. El Fondo de Defensa para los Niños calcula que las balas matan diariamente a 14 niños. El porcentaje de homicidios juveniles saltó de un 8,5% por cada 100.000 en 1984 a un 30,2%, y el año pasado se situó en un 17%.
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