El Consell consume en enero el 36% del dinero previsto para gasto farmacéutico, según el PSPV

El Consell ha transferido al Presupuesto de la Generalitat para 1999 el déficit farmacéutico del anterior ejercicio presupuestario, cifrado por los socialistas valencianos en 37.500 millones de pesetas. La Tesorería de la Generalitat contabilizó esta deuda los pasados días 28 y 29 de enero, lo que, según el PSPV, evidencia que no se había contabilizado en las cuentas públicas de 1998. Este trasvase de deuda vicia el presupuesto de gasto farmacéutico previsto por el Consell para 1999 -103.000 millones de pesetas-, que en el primer mes del año se recorta en un 36%.

El gasto farmacéutico de la Consejería de Sanidad de los últimos cuatro meses del año pasado ha aparecido. Según datos en poder del PSPV-PSOE, la Tesorería de la Generalitat contabilizó la factura sanitaria de 37.500 millones de pesetas los pasados 28 y 29 de enero. La deuda, adquirida en el pasado ejercicio, se pagará con cargo al Presupuesto de 1999, según los socialistas. Este partido considera probada su denuncia de que el Consell ocultó el gasto farmacéutico acumulado entre septiembre y diciembre del año pasado para evitar una desviación presupuestaria de varios miles de millones de pesetas. El trasvase de la factura farmacéutica crea un círculo vicioso en las cuentas de Sanidad, dado que el presupuesto farmacéutico se ve recortado durante el primer mes del año en cerca de un 36%. Es decir, de los 103.000 millones de pesetas presupuestados por el Consell para subvencionar los medicamentos de este ejercicio, algo más de un tercio se destinará directamente a amortizar una deuda adquirida el año anterior. Recorte presupuestario La consecuencia es obvia. Si en 1998 el presupuesto farmacéutico se agotó en poco más de ocho meses, este año, con una minoración de partida de 37.500 millones, el dinero se acabará mucho antes, salvo que el Gobierno valenciano cubra el déficit con alguna modificación presupuestaria o con alguna operación de tesorería. "A partir de julio no tendrán presupuesto y, entonces, ¿qué harán?", declaró ayer el portavoz socialista en las Cortes Valencianas, Antonio Moreno. La situación a mediados de año podría ser de auténtico colapso financiero, dado que la previsión de gasto farmacéutico para este año es conservadora. De hecho, la Consejería de Sanidad, que dirige Joaquín Farnós, ha elaborado un presupuesto que recorta en 9.000 millones de pesetas lo que gastó en realidad en medicamentos el año pasado. En cualquier caso, los socialistas no se dan por satisfechos con la aparición de la deuda e insisten en sus sospechas de que el Consell no actuó correctamente, dado que no contabilizó en los Presupuestos de la Generalitat el gasto farmacéutico de cuatro meses a pesar de haberlo satisfecho. El partido de la oposición exige saber quién ordenó aquellos pagos y cómo se abonó porque "pagar sin disponer de crédito presupuestario es ilegal", sostienen los socialistas. El PSPV-PSOE no encuentra otra explicación al caso que hayan sido los bancos que operan habitualmente con la Generalitat los que adelantaran el dinero para cubrir el desfase presupuestario. En ese caso, exigen conocer el sobrecoste de esta "maniobra financiera" que, a su juicio, sólo pretende camuflar la deuda de la Generalitat. En su opinión, el Gobierno valenciano podía haber atajado este déficit con una modificación presupuestaria, es decir, reasignar el presupuesto de una partida a otra. O bien recurrir a operaciones de tesorería, fórmula empleada por las administraciones para paliar desajustes temporales de tesorería. La Consejería de Economía y Hacienda, cuyo titular es José Luis Olivas, no respondió ayer a nada. Mutismo absoluto. Como ya manifestó anteayer un portavoz de este departamento, la Generalitat ha cubierto los pagos y éstos están incluidos en la contabilidad presupuestaria. Un portavoz del Banco de Valencia (Grupo Bancaixa), entidad que se encarga de ingresar, previa orden de la Generalitat, el dinero de las recetas a los farmacéuticos de la provincia de Valencia -el BBV se ocupa de Castellón y Banesto de Alicante- dijo ayer que las operaciones que el banco tiene con sus clientes "son confidenciales", aunque sí aseguró que la entidad tiene "todo sus riesgos cubiertos". Moreno insistió en que este caso evidencia, en cualquier caso, la incapacidad del Gobierno valenciano de controlar el gasto. El desfase presupuestario denunciado por los socialistas se produce dos años después de que la Consejería de Sanidad realizase una campaña publicitaria en la que animaba a los valencianos a ahorrar en la factura pública farmacéutica.