"Se nos escapó un misil"

El general norteamericano Anthony Zinni, jefe de las fuerzas en el golfo Pérsico, lo explicó así: "Se nos escapó un misil". Y ya está, no pasa nada, 11 muertos civiles no son muchos, al fin y al cabo son iraquíes, no es como si fueran buenos, es decir, europeos o americanos. Los muertos, según la zona geográfica, producen más o menos dolor, hay muertes que, hoy en día, nos son más tolerables que otras.Por ejemplo, en África nos molestan los rostros demacrados del hambre y la brutalidad de sus guerras, pero hemos aprendido a convivir con estas imágenes de sobremesa; la India es otro de esos lugares en los que la muerte parece más normal, donde el sufrimiento de los indefensos es admisible. Y, por supuesto, Irak; en Irak no importan de verdad las bajas civiles, porque Sadam Husein es el diablo, así lo ha decretado EEUU; y yo estoy de acuerdo, Sadam es malo, pero sigo sin entender por qué debe tanta gente inocente pagar por este dictador, por qué las imágenes de los chavales destrozados por los misiles en hospitales que carecen de casi todo son un mal menor a cambio de acabar con Sadam (al que, por cierto, se puede ver tan contento todos los días en los mismos telediarios en que salen los heridos). Ya no recuerdan en EEUU por qué llegó Sadam al poder, con ayuda de quién se transformó de amigo Sadam, el que lucha contra el integrismo de Jomeini, en el enemigo público número uno del mundo. Aún le quedarán gran parte de las armas que los americanos le regalaron para luchar contra Irán, ¡qué ironía!, el pueblo iraquí hambriento y oprimido por armamento americano desde dentro y desde fuera.

Me pregunto cuántos pueblos, etnias, razas, culturas, sociedades, o como queramos llamarlos, del mundo nos parecen susceptibles de sufrir y morir por los horrores de sus líderes políticos. Un misil sobre un edificio en los Champs Elisèes, 11 franceses muertos porque no me gusta Chirac; un misil sobre un edificio de la Fifth Avenue, 11 estadounidenses muertos porque no me gusta Clinton; o un misil sobre un edificio de la Gran Vía, porque no me gusta Aznar, 11 españoles muertos.-