Molins rechaza la idea de que el alcalde salga de la lista más votada

El candidato de Convergència i Unió a la alcaldía de Barcelona, Joaquim Molins, rechazó ayer la idea de que el futuro alcalde de Barcelona, tras las municipales del 13 de junio, fuera a salir de la lista más votada. Molins añadió que es partidario de aplicar la actual ley electoral mientras siga en vigor y por lo tanto no acepta declaraciones de algunos políticos, como el actual alcalde, Joan Clos, que se manifiestan partidarios de que gobierne la lista más votada. "La ley actual no dice esto. Por lo tanto, respetemos las reglas del juego y no confundamos a los ciudadanos. Si no gusta la ley electoral, que propongan cambiarla y yo lo aceptaré. Ahora bien, si se quedan en las palabras y no pasan a los hechos, que se callen. No obstante, insisto en que mi objetivo es recibir el apoyo mayoritario de los ciudadanos de Barcelona". La ley electoral, dijo Molins, establece que el alcalde, como el presidente del Gobierno, es elegido en segunda instancia, es decir, por los concejales electos y por los diputados respectivamente, y acaba gobernando quien tiene una mayoría en el Ayuntamiento o en el Congreso. En democracia, añadió el candidato de CiU a la alcaldía de Barcelona, las cuestiones formales son muy importantes, y las leyes electorales conforman una parte esencial de la democracia. "La ley electoral no la he hecho yo, agregó el candidato de CiU: "Se aprobó en 1977 por consenso y continuamos utilizando la misma. La ley establece que los alcaldes son una elección de segundo grado. Si alguien quiere cambiar esto, debe cambiar la ley electoral buscando otras fórmulas, como la elección directa con una segunda vuelta u otro sistema".