Agonizan las viejas fuerzas y nacen nuevos actores

El determinante ministro de la cartera de Planificación, Teodoro Pefkoff, guerrillero en los sesenta y después dirigente del Movimiento al Socialismo (MAS), fue nombrado titular de esa cartera porque Caldera creyó que su perfil, su antiguo acercamiento a los sectores más necesitados del país, le convertían en el portavoz idóneo para comunicar a la población el plan de ajuste decidido por la Administración cuando la coyuntura derrotó al populismo del primer año de mandato. "En estas elecciones no estuvo en juego el sistema democrático, sino un cambio histórico, de los muchos que ha vivido Venezuela, en el que agonizan las viejas fuerzas y nacen nuevos actores". Se refiere Petkoff a los partidos Acción Democrática (AD), socialdemócrata, y Copei, democristiano, que renunciaron a sus propios candidatos a la presidencia porque las encuestas les anticipaban un duro castigo."Algunos de los partidos que están en crisis se recuperarán, otros no. Algunos de los nuevos partidos cuajarán y otros no, pero sin duda alguna éste va a continuar siendo un país democrático". Al igual que otros funcionarios, descartó la posibilidad de golpes y perturbaciones del orden democrático. "Aquí, en los momentos más brillantes del bipartidismo, la gente compraba comida en las elecciones, y había rumores de golpe de Estado. Así que ahora no es diferente, con el añadido, además, de que estas elecciones no son un simple cambio, sino un cambio histórico".

La herencia dejada al nuevo presidente es cuantiosa en problemas. Casi ninguna de las optimistas predicciones de Petkoff se cumplió. Y Venezuela acusa un agotamiento de sus cuentas, entra en el nuevo mandato con problemas para afrontar los gastos de cuenta corriente, y sin poder acometer obras públicas de importancia.